lunes, 31 de julio de 2017

Amor

En todos los momentos de nuestra existencia hay amor. Siempre nos estamos quejando pero cuando vemos uno verdadero parece que nos asombramos como si fuera una cosa extraña, y no lo es. Hoy hablemos de amor, que hay mucho.
Hay amor entre los animales, esta es la prueba...y entre humanos...faltaría más.

Un hombre estaba haciendo trabajos de reforma en su casa y, al disponerse a cambiar una pared de madera, se dio cuenta de que, en un hueco, había una lagartija completamente inmóvil. Se detuvo a contemplarla mejor y descubrió el motivo de su inquietante inmovilidad: tenía la pata atravesada por un clavo y, por la pinta que tenía la extremidad, eso sucedía desde hacía mucho tiempo.
El caso de la lagartija atrapada se convirtió en un misterio, porque, ¿Cómo había logrado sobrevivir el pequeño reptil sin la posibilidad de moverse ni unos centímetros para atrapar pequeños animalitos?
Así el hombre decidió investigar a fondo para hallar respuesta al enigma.
Se pasó toda una mañana observando el hueco donde se escondía el animalito y, de pronto, vio cómo otra lagartija se acercaba hasta ella con un trozo de comida en la boca para alimentar al reptil prisionero. El hombre quedó aturdido y emocionado al mismo tiempo con lo que había descubierto.
Si había una prueba de amor sobre la superficie de la tierra, era ésta. Si una criatura tan pequeñita puede llegar a amar con tal intensidad a otro ser, qué no podíamos conseguir los humanos si lo hiciéramos con la misma generosidad y pasión.

Esto ha ocurrido con animales. Ahora vamos a ver como reaccionan los humanos.

Una pareja de jóvenes estaban enamorados desde hacía tiempo y pronto iban a unirse en matrimonio. Pero, apenas unos meses antes de la boda, la novia sufrió un  aparatoso accidente que le dejó el rostro desfigurado.
"-Creo que no va a ser posible que nos casemos. Un accidente me ha dejado el rostro destrozado. Búscate una mujer hermosa como tu te mereces.. Ya no soy digna de ti", escribió la joven en una carta dirigida a su novio. Él no tardó en contestar y lo hizo con una asombrosa noticia:
"-Quién soy indigno de ti soy yo. He enfermado de la vista y el médico me ha dicho que quedaré totalmente ciego .Piénsatelo, yo sigo deseando casarme contigo".
Y así fue. Celebraron la ceremonia y nadie había visto a una pareja más enamorada que ellos. Vivieron 20 años de plenitud y felicidad, en los que la muchacha fue lazarillo que le guio entre las tinieblas. Pero un día, ella enfermó con muy mal pronostico y, mientras agonizaba, solo se lamentaba de la desdicha de tener que dejar a su marido desasistido. Cuando ella abandonó este mundo, su esposo abrió los ojos ante el asombro de los presentes.
"-Jamás estuve ciego. Fingí para que mi amor no se entristeciera pensando que veía su rostro desfigurado", confesó entre lágrimas.

Que maravillosas formas de amar.

Hoy día 31 de julio es San Ignacio de Loyola, patrón de los Jesuitas.
No he dejado de acordarme, que un día tal como hoy, allá por los años 50, y en compañía de mis compañeras, cuidadas por dos monjas, nos encontrábamos en Comillas (Santander). Habíamos ido de visita, sería muy largo contar todo lo que ocurrió aquel día. Eran años malos, no teníamos caprichos, pero como era el patrón había habido comilona extra, cuando llegamos nosotras ya solo quedaban los postres y, vive Dios que nos pusimos "moradas" de helado, natillas fresquitas y un sin fin de dulces ya que un sacerdote nos metió de "extranjis" en la cocina.
No me he olvidado de ninguna de mis compañeras, ni de las monjas tampoco, fueron muy buenas con nosotras.
Felicidades a todos los Ignacio.

12 comentarios:

  1. Los costumbres y actuaciones de los animales no dejan de sorprenderme.
    Muy bueno lo del falso ciego, eso si que es amor.
    Un abrazo.

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    1. A pesar de todo fueron felices mas de veinte años.
      Y si, los animales siempre nos sorprenderán.
      Un abrazo Alfred.

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    1. Totalmente de acuerdo Susana y además, amando se es muy feliz.

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  3. Qué maravillosos ejemplos de amor tus relatos, Ma de los Angeles, en el primero, espero que el buen señor haya liberado a la pobre lagartija luego de la experiencia! Y tu agradecimiento a las épocas de tu adolescencia muestra que ahí también estuvo el amor de quienes te rodeaban, un abrazote!

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    1. Parece mentira que me acuerde de tiempos tan lejanos, aunque a ti no te extraña porque has leído cosas mías. Me cuerdo mucho de aquellas maravillosas compañeras, de las monjas y también de los curas. Tuve la suerte de conocer a gente muy buena en aquella época.
      Un abrazo María Cristina.

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  4. Bonitos relatos. Los perros sienten cuando su amo esta triste o contento. Las personas por desgracia somos diferentes.
    Un abrazo.

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    1. Los humanos somos peores que los animales. Mi gatita Rufa era maravillosa y muy inteligente. Todos lloramos cuando murió.
      Un abrazo Matías.

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  5. Unos relatos muy emotivos los que cuentas y es que el amor es ante todo entrega y generosidad. Vaya con el fraile que bien os alimentó, ya me hubiera gustado estar allí.Besicos

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    1. ¡¡¡Es tan hermoso amar!!!
      Charo, fíjate si han pasado años y no hay un mes de julio que no me acuerde de aquel día de San Ignacio de Loyola.
      He pasado varios años con monjas Jesuitinas. Algún día contare cosas buenas y menos buenas que pasé en aquellos maravillosos años.
      Un besito.

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  6. Hola Mª Angeles, siempre he dicho que el amor es uno de los motores que tenemos para seguir el día a día y que mejor ejemplo lo que nos cuentas aquí, me han gustado pero me he quedado con la intriga de si pudo soltar a la pobre lagartija.
    He estado sin ordenador hasta hoy ya que se estropeo, me alegro que ya estés entre nosotros y hayas disfrutado de tus vacaciones:)

    Besos.

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  7. Muchos son los que me han preguntado si sé que ocurrió con la lagartija, pues bien. Estas y varias leyendas me las cuenta un profesor de Psicología de la Universidad de Alcalá de Henares y son ejemplos que él pone a sus alumnos (entre los que algunas veces me encuentro). Como no soy muy lista cojo las enseñanzas que puedo y en este caso, al tratarse de amor, seguro que lo que quería decir es que, cuando hay amor, todo se puede solucionar. Seguro que el Lagartijo, después de alimentar a su querida Lagartija, con todo su amor la liberaría. Bueno, esto es de mi cosecha. cada uno que lo termine como más le guste.
    Un besito Piruja

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