No me digáis que el dibujito no está gracioso...
Una de las veces que hemos ido a Aranjuez, fue antes de la pandemia, y por supuesto visitamos el Palacio donde están los vestidos de novia de la reina Sofia, sus hijas las infantas y nuestra reina Letizia. Todos estan preciosos, pero lo que a mi me pareció, sobre todo en uno de ellos...¿Cómo se metió en él su dueña?
Como es natural, visto un Palacio, visto todos pues casi todos se asemejan, no obstante, espero volver pronto...
Ya cuando volvíamos y al pasar por Valdemoro, el próximo pueblo, como todos sabéis es Pinto. Yo, como siempre, dije la famosa frase: "Estamos entre Pinto y Valdemoro". Mi hijo me dice: -No me cuentes otra vez la frase que ya me la has contado muchas veces- pero yo, toda sabihonda se la vuelvo a contar...por si acaso no se acuerda.
Resulta que en una ocasión, dos amigos de Pinto, fueron de juerga a Valdemoro. Por supuesto que a la vuelta iban cargaditos del buen vino de Valdemoro y ya era medianoche cuando se pusieron a descansar. Entre ambos pueblos, hay un arroyo y como nuestros amigos no tenían mucho que hacer y además el vino no se estaba quieto, uno de ellos saltó el arroyo y su amigo le preguntó, dada la oscuridad de la noche:
¿Dónde estas Pepe? Este le contestó:-Estoy en Pinto...
Acto seguido volvió a dar otro salto diciendo: -Ahora estoy en Valdemoro.
Esta operación la hizo varias veces...hasta que cayó dentro del arroyo, su buen amigo al oír el trastazo dijo: ¿Dónde estás Pepe? A lo que este contestó:
-Ahora estoy entre Pinto y Valdemoro.
Hay otra versión que cuenta el historiador González Arteaga que argumenta tras rechazar la leyenda del borracho, que el origen de la frase se remonta al siglo XIII, cuando Madrid y Segovia pugnaban por las tierras de Valdemoro y Pinto. El enfrentamiento por los terrenos de cultivo llegó a tanto que el mismo rey Fernando III el Santo tuvo que asignar con "carácter irrevocable" , Pinto a Madrid y Valdemoro a Segovia. Para que no quedara ninguna duda, el monarca ordenó colocar 42 hitos en las lindes. Algunos persisten todavía.
El rey presenció durante varios días la colocación de hitos, así que los cortesanos, cuando alguien preguntaba por Fernando III, respondían, "está entre Pinto y Valdemoro".
Así se curó en salud el historiador Arteaga, pero en Pinto o en Valdemoro se sigue creyendo en la leyenda del borrachín.
A mi tambien me gusta más, yo me quedo con los dos borrachines, además, tanto un pueblo como otro, los dos pertenecen a la Comunidad de Madrid.