miércoles, 30 de noviembre de 2011

"El puente"

Pongo puente entre comillas porque lo que va a ocurrir la próxima semana en España es "demasiao" como diría un castizo madrileño.
Resulta que la semana del 5 al 11 de diciembre, incluidos el 3 y 4 anteriores y si me apuráis un poco lo ponemos ya desde el viernes 2, esto no es un puente, es un acueducto más grande que el de Segovia, que si la memoria no me falla tiene una logitud de 728 metros (unos 1918 pies) y una altura de 28,50 m.
Estas "vacaciones" (para el que pueda cogerlas, que son muchos) no creo que beneficie mucho a la economía nacional, ni a la internacional.
Me he quedado sorprendida esta mañana cuando estaba en la peluquería y, como siempre, la peluquera me pregunta que día voy la próxima semana, yo como siempre voy los miércoles, le contesto que como siempre, o sea el miércoles siguiente. Entonces me dice que solo abren el lunes y el sábado. Me quedo sin saber que decir, luego me explica: - Verás, me dice, no tenemos a nadie citado por que se van de "puente" y no voy a tener la peluquería abierta gastando luz y calefacción si no viene nadie, entonces le digo que no pasa nada, ! que le vamos hacer¡
Pero ella muy amable y, quizá porque soy cliente habitual me dice: -Si vienes el miércoles a las 9 de la mañana, abro para ti sola y en cuanto te peine cierro y me voy a mi casa. Enseguida le he dicho que no, que no se preocupe, que ya me apañaré yo sola. No lo ha consentido, por lo tanto y, aunque voy siempre a la 11 de la mañana, ya que la pobre se va a sacrificar por mi, yo también pondré algo de mi parte aunque tenga que madrugar un poquito.
Una de las señoras que estaba allí ha dicho que ella se iba el viernes día dos y volvía el sábado día 10. Yo pienso que si hacen eso muchos españoles...no salimos de la crisis en 100 años. Espero equivocarme, claro que si no me equivoco...como no lo voy a ver...
De todas las maneras, les deseo que se lo pasen bien. Yo seguro que me lo paso bien, pues como voy hacer lo que me gusta, aunque eso si, sin salir de casa...que gustazooooo.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Lagrimas de una abuela

Siempre da pena ver a alguien que llora, si es un niño, sientes ternura por lo que le puede pasar. Si es una mujer, es que alguna cosa grave le pasa. Si por el contrario es hombre...ya no digamos, la cosa es fuerte, pero si vemos llorar a una abuela o abuelo, eso si que es duro y yo la he visto llorar.
Se trata de una señora conocida que vive cerca de mi casa, nos vemos en el "Super", en la panadería e incluso en la peluquería, es por eso que tengo bastante amistad con ella.
Ayer sábado nos encontramos mientras las dos esperábamos nuestra vez para comprar en la charcutería de un supermercado, al ser sábado, había mucha gente, por lo que tuvimos que esperar un rato largo.
No hace mucho se la veía con sus nietos haciendo la compra y lógicamente le pregunte por ellos. Entonces se echó a llorar. Yo me asusté y le pregunte si les había pasado algo malo, ella me contestó que no, solamente que ya no la necesitaban. La conversación se alargó.
Recordé cuando la veía con sus tres nietecitos (dos eran mellizos). El mayor con diez años y los mellizos eran bebés. Su hija y su esposo viven en Guadalajara y todos los fines de semana, "puentes", Semana Santa y cuando les venía en gana, le traían a los críos, se los dejaban y ellos se marchaban, bien de viaje al extranjero o simplemente a hacer turismo por Madrid, el caso era dejar a los niños con la abuela. Si ya es trabajo criar a un bebé, imaginemonos a dos a la vez.
María, los cuidaba, los hacía, claro está la comida y, no creáis que es una niña, no, tiene más de setenta años. Todas las vecinas criticaban mucho a la hija de María, porque decían:-No viene a ver a su madre, viene a dejarle los niños.
Así han pasado quince años...se dice pronto... quince años. Ahora ni viene la hija, ni el yerno, ni ninguno de sus nietos. ¿Sabéis por qué? Según me ha contado María, un día que hacían una excursión con la parroquia de su barrio...y el mío, se apuntó para ir a Burgos a conocer un convento de una monjas maravillosas (yo también fui), y cuando llegaron a la casa y se encontraron con la puerta cerrada, les dio tal rabia que ya no han vuelto. No solamente no han vuelto a dejarle los chavales si no que no vienen ni siquiera a verla, ella dice: -Como ya no les sirvo, no me merezco ni una visita, y se echo a llorar.
Aquellas lágrimas de María me llegaron al corazón. !Que pena me dieron¡ Le dí un abrazo y le dije que no se preocupara, que ellos se perdían su compañía. Ella no tenía consuelo pues creo que el nieto mayor ya tiene novia y ni siquiera se la ha presentado, pensó que a lo mejor, tampoco la invitaban a la boda.
Yo para animarla un poco le dí mi apoyo, mi solidaridad y mi cariño. Después de que salimos del "super", la invité a tomar el aperitivo, ella dijo: -No, solamente un café. -Nada de eso, le dije yo, vamos a tomar una cervecita y esta vez con alcohol, ja, ja, ja.
Nos tomamos dos cervezas, como dije, de las auténticas, un pinchito de tortilla y otro de lomo y nos fuimos más contentas que unas pascuas. Le dí dos besos y me ofrecí para que otro día tomemos otro aperitivo, nada de cafés. !!Como se reía¡¡
Verla reír me hizo !!tanto bien¡¡
Cuando llegué a casa me estaba esperando mi hijo, eran las tres de la tarde y la comida sin hacer. Le pareció raro verme tan contenta y si comida, yo solo hacía reír y reír. Después que le conté lo sucedido y con unas pintas de que no tenía ganas de cocinar, cogió el teléfono y llamó al restaurante chino para que nos trajesen comida, ja, ja, ja, ja.
Creo que el próximo sábado, voy a ir en busca de María e iremos las dos juntas al supermercado.
Haré cualquier cosa con tal de ver a una anciana sonreír, aun que me tenga que...tomar una cervecita. !Ja¡

martes, 22 de noviembre de 2011

Heráldica

Lo primero un saludo a mi seguidora Marilyn de EE UU.

Estaba hoy repasando los escudos de algunos pueblecitos de España, que la mayoría son preciosos, cuando me ha llamado la atención que en cuatro pueblos de Asturias, los cuatro escudos tenían seis cuervos en su interior y uno de ellos, solo tenía los seis cuervos. Rápidamente me intereso para saber el porqué y, esto es lo que he averiguado:
Es una leyenda que vive en la memoria de los pravianos desde tiempo remoto. El escudo de Pravia, Cudillero, Muros y Soto del Barco lucen con orgullo en su escudo municipal 6 cuervos.
Hace ya varios siglos, en aquellos tiempos en España estaba dominada por los sarracenos, cuando los primeros gritos de independencia suenan en las agrestes montañas de Asturias, un valeroso paladín praviano, que lucha contra el infiel invasor, advierte la presencia de un grupo de árabes.
Duda si entrar en combate. El enemigo era muy superior en número e iban muy bien pertrechados de armas.
Un río, probablemente el Nalón separa a ambos grupos. Estando el valiente capitán praviano en estas dudas, ve de repente en el Cielo 6 cuervos revoloteando y graznando de tal manera que pareciese que querían mandarle un mensaje.
El valiente praviano ve en aquellos cuervos un signo de mal agüero para el enemigo y, dirigiéndose a los pájaros que ya sobrevolaban el río, les dice.
Aves de poca valía
que del hombre sentís pena.
Venid en mi compañía.
Pues de carne ajena o mía
os daré la panza llena.
Nuestro valiente capitán, acompañado de sus guerreros, se lanza sobre los sarracenos infligiéndoles una gran derrota, de tal suerte que pocos lograron huir dejando el campo de batalla lleno de cadáveres.
Después de esta batalla, el capitán le dijo a sus soldados.
Siempre vi con gran furor,
(de memoria no me acuerdo)
Muchas aves contra el cuervo.
Seguiré con gran denuedo
por no ver de su color;
y él las sigue con vigor,
con su pico agudo y fuerte,
siguelos hasta la muerte,
hiriéndoles de tal suerte
que de ellos es vencedor.
El rey, enterado de esta hazaña, alienta al bravo soldado a que le indique que premio desea por tan maravilloso hecho.
Nuestro héroe pide a Su Majestad que le autorice a él y a sus descendientes pintar por armas en su escudo los 6 cuervos, como recuerdo de esta batalla. Y el Rey le concede ese honor.

Es de suponer que en la tal batalla había hombres de los cuatro pueblecitos, o sea, Pravia, Muros, Cudillero y Soto del Barco, que son los que llevan en su escudo los seis cuervos.
Me ha encantado esta leyenda, pues como dice mi nieta que tengo mucha imaginación, yo ya veía a los guerreros dándose tortazos y pisotones, algunos tendrían prisa por terminar e irse a casa a ver a su amada. Estaría esperándole con una lindo vestido azul de muselina y un gran capirucho con velos de gasa blancos en la cabeza y, con el estofado de ciervo preparado, porque se supone que irían a ver al Rey varios días después...¿O no? Si no lo dejo veo que me lío, más vale que corte...ale... otro día más.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Elecciones

Hoy ha sido un día de elecciones aquí en España. Ha llovido más que cuando enterraron a la tacones, la verdad es que no se quien era la tacones pero yo he oído ese dicho a alguien cuando llueve mucho.
Después de misa me he ido a cumplir con mi obligación de buena ciudadana, o sea, votar. Como ya he dicho llovía a mares y, cosa curiosa, había más gente que cuando ha hecho un día de sol. Entre los paraguas, los impermeables, los bolsos y el gentío que había casi me pierdo de mi hijo. Este cuando ha visto tal aglomeración me dice que no espera que él vuelve por la tarde, yo le digo que haga lo que quiera pero yo me quedo, pues pienso que voy a llegar a casa empapada hasta el refajo y no pienso volver a vestirme más tarde. Al final nos hemos esperado y hemos cumplido.
Ya de vuelta en casa y como eran cerca de las 3 de la tarde se trataba de hacer una comida rápida y, ¿Que cosa hay más rápida que unos buenos huevos fritos? El nene dice que si lo puedo acompañar con arroz y salsa de tomate pero que él quiere los huevos a la plancha, Agggg...digo que si. Preparo el arroz, la salsa de tomate (de bote) y pongo la sartén para hacer los huevos "asados".
En la sartén pongo una lágrima de aceite, la reparto con la brocha y la pongo al fuego, bueno a eso que llaman fuego que no es otra cosa que la "Vitro", cuando está caliente pongo los huevos, tapo la satén y espero 2 minutos. Aquello no se parece en nada a unos buenos huevos fritos; no tienen aceite, luego a mi me parece que están asados. Como se han pegado las claras tengo que separarlas con cuidado, pero no hay miedo de que se rompan, los huevos están más duros que...bueno que están "Bien hechos". A mi no me hacen ni pizca de gracia pero mi "niño" dice que están estupendos, le digo que Santa Lucía le conserve...!Ah¡ No que esta santa es de los ojos. Bueno el caso es que hemos comido, eso sí, sin una gota de grasa, y, como decía mi madre, "otros comerán menos"
Bueno, españoles, felicidades a los que estén contentos porque ha ganado su elegido y a los que no...otra vez será.

sábado, 19 de noviembre de 2011

El vestido de cretona

Quizá alguien no sepa lo que es la cretona, sobre todo los jóvenes, las señoras si que lo saben.
Ayer viernes y mientras comíamos mi amiga Piluca y yo, rememorábanos cosas de nuestra juventud. Nos reíamos un montón y otras veces teníamos que hacer esfuerzos para no llorar.
Me contó que en cierta ocasión, por las fiestas de nuestro barrio, quería un vestido nuevo. En aquellos tiempos, en las fiestas era cuando estrenábamos un vestido pero había veces que era difícil para nuestros padres, pues como eramos muchos hermanos alguno se tenía que quedar sin su traje nuevo, tal fue el caso ese año de 195 y...en el que Piluca se quedó fuera de combate. No creáis que ella se amilanó, no, nada de eso. Empezó a pensar y dado lo inteligente que es, enseguida dio con el resultado. Os cuento.
Las casas del Madrid de la posguerra no eran muy grandes y los que vivíamos en ellas eramos muchos, por ese motivo casi todas las familias al no tener un cuarto de invitados, como tenemos ahora, tenían en el comedor...UNA CAMA MUEBLE, esta cama para disimular el colchón, el somier y no se cuantas cosas más, estaba disimulada con unas "Faldillas" hechas de cretona, esta tela solía ser casi siempre floreada, tenía un fondo rojo, negro o azul y varias flores estampadas que resultaba muy bonita y decorativa. En mi casa, además de las faldillas de la cama, mi madre puso cortinas de la misma tela, por lo que aquello parecía que estábamos en la selva.
Cuando mi amiga supo que no tenía vestido nuevo para ir a la Kermes el día de la Virgen del Carmen, dada su inteligencia, empezó a dar vueltas por la casa pensando y buscando algo para hacerse un vestido. En lo primero que se fijó fue en...la cretona de la cama mueble. Rauda como una centella fue en busca de su madre (que todo hay que decirlo debía de ser una santa, la mía no hubiese aceptado el trato), le dijo: -Mamá, ¿me das las faldas de la cama mueble para hacerme un vestido? La buena señora dijo qué si y que sentía mucho no haber podido comprarle un vestido nuevo.
Piluca puso manos a la obra, cogió la tela, la cortó a sus medidas, pero le faltaba un poquito para el canesú. Como ya tenía la venia de su madre, se fue en busca de algo rojo que era el color predominante de la cretona y, ¿Que diréis que encontró? Pues un par de servilletas rojas.
Me contó que además cerró el escote con un cordón hecho también por ella y al final...le quedó un precioso vestido.
No quedó aquí la cosa, pues cuando llegó con sus amigas al baile el ambiente era de lo más fenómeno. Allí estaban Carmen Sevilla, Lola Flores y más gente conocida pues iban a elegir la Miss de las fiestas. Estando ella bailando, se acerco Perico Chicote y le dijo: -Señorita, apuntesé que vamos a elegir a la Miss y usted es muy guapa. Su compañero de baile también la animó, pero ella dijo: -Si se entera mi padre que me cogen Miss me da una zurra.
Así eran aquellos tiempos. Teníamos respeto al padre, a la madre, después al marido y ahora a los hijos. ¿Tendremos que temer también a los nietos? Piluca no fue Miss por miedo a su padre y yo no fui a la Kermés porque en mi casa nos habíamos comido las faldas de la cama mueble y por lo tanto, no tenía vestido que ponerme, ja ja ja.
!!!Las cosas que nos hemos perdido¡¡¡

martes, 15 de noviembre de 2011

Lumbrera

No se como estamos en crisis habiendo tanto lumbrera.
Esto que voy a contar lo he visto, mejor dicho, lo he leído hoy en el periódico 20 minutos.
Una señora o señorita que dice llamarse Marisol Albares Montalvo, dice lo siguiente:
Después de que ha hecho muy bien las cuentas, yo creo que ha metido la pata.
La tal mujer dice con respecto a las próximas elecciones de 20 N. que es un despilfarro el gasto que esto conlleva, como ella, es una "Lumbrera" dice: Hay 221.179 urnas, un presidente y dos vocales en cada mesa a los cuales les dan 60 euros por persona, total...40.000.000 de euros (siempre según esta señora).
Ahora dice que habiendo cinco millones de parados que están cobrado prestación económica se les ponga a ellos en las mesas y no pagarles nada. Además dice la buena mujer que en caso de que no acudan a las mesas electorales (esto ya riza el rizo), como digo, en caso de ausencia quitarles el subsidio de desempleo. !!!Que bonito¡¡¡
Doña Marisol, ¿ha estado usted alguna vez en el paro?
¿Le parece bien que un padre de familia que esté cobrando los 400 euros se los quiten por no acudir a hacer ese servicio?
Estoy segura que si llamaran a personas que estén sin trabajo, seguro que irían, pero no había que darles 60 euros, que por otra parte es para que se compren un bocadillo por estar en los colegios electorales todo el santo día, les tenían que dar por lo menos tres veces 60.
Tampoco me parece bien que por que estén sin trabajo nos aprovechemos de ellos.
Señora o señorita, creo que será raro que usted lea esta entrada, pero de todas las maneras le digo desde aquí, que no escriba usted a un periódico par decir una memez.
Casi voy comprendiendo a los "indignados" pues hoy yo me he sentido indignada después de leer lo que usted ha escrito.

sábado, 12 de noviembre de 2011

La seguridad en Tokio

Me he quedado admirada al leer la seguridad de los japoneses, ojo, japoneses, no chinos. No es que no me gusten los chicos a los que todos asociamos con las tiendas de "Todo a..." a lo que quieran porque estos con el cambio de moneda, "han sacado los pies de las alforjas", como decía mi madre. A mi, como buena cristiana que soy, me gusta todo el mundo, pero no dejo de admirar en este caso, a los japoneses
Bien, yo me refiero a los japoneses de Japón, y si nos hacemos la pregunta ¿Por qué Tokio es tan segura?, estas son las leyes por las que se rigen.
1. Las leyes prohiben tener armas en casa y las penas son muy severas: de 1 a 10 años de prisión y hasta 50.000 euros de multa.
2. En Tokio existen alrededor de 1.000 minicomisarías que cuentan entre uno y tres agentes. Están en todos los barrios, las 24 horas de servicio y ayudan a todo el que lo requiere.
3. Si llamas al nº 110 desde cualquier teléfono, te comunicas inmediatamente con la policía y acude en menos de 5 minutos.
4. Existen 45.000 policías en la ciudad y están tan comprometidos con su puesto que no dudan en perder la vida por los que los necesitan.
5. No existe la corrupción entre los agentes. Si se intenta sobornar a uno, la persona es arrestada in situ.
6. Si haces algo malo, existe al creencia de que es un acto de no respeto a los antepasados y algo vergonzoso.
7. La sociedad japonesa no es tan individualista como en occidente. Están pendientes del grupo y se valora que aprecies, respetes o ayudes a tus semejantes.
8. Japón es una isla, por lo que sus fronteras son marítimas. Es practicamente imposible que los criminales huyan con facilidad.
9. El país sólo tiene una etnia-hay poquísimos extranjeros-, por lo que se ha mantenido una tradición que contempla altamente la solidaridad.
He hecho un resumen y he llegado a la conclusión...Que nosotros también "cumplimos" las 9 reglas japonesas"... No me lo creo no yo... ¿A que tu tampoco?

jueves, 10 de noviembre de 2011

El Abad sordo

Esta leyenda no me la he inventado yo, no, no, no. Luego me decís que me lío como las persianas, no, ahora no me he liado, es una leyenda que ni recuerdo cuando la he leído, pues, por si no lo sabéis, creo que no hay nadie en el Planeta que lea más que yo. Que lean mucho los habrá pero más, quizá ninguno. Bueno no quiero ser pedante respecto a esto pero me suelo leer unos 70 libros al año, libro más libro menos. Bueno a lo que iba, que como dice mi nieta tengo mucha imaginación.

Se dice que una noche a principios del siglo XVII (juro que yo no había nacido), el Abad de la Basílica de Guadalupe vio que entraba un hombre de elegante apariencia que le solicitó la confesión, por lo que el Abad pidió a unos familiares que le esperaban, unos minutos. Después de un rato, el Abad salió con el rostro pálido, y cerró las puertas, por lo que sus familiares se extrañaron y le preguntaron por qué cerraba si el hombre elegante aún no había salido, sin embargo, el Abad se negó a contestar y los apuró a dejar el lugar.
Ya en casa de los familiares, uno de sus sobrinos le preguntó qué había pasado, el Abad llevó su mano derecha hacia su oído, haciendo notar que se le dificultaba escuchar. Después de que el sobrino le hiciera nuevamente la misma pregunta, el Abad respondió que el hombre que había estado en la Basílica horas antes...era un muerto que había venido de ultratumba para confesarse, y que después de escuchar la confesión tenía dificultad para escuchar por el oído derecho.
El Abad nunca pudo contar lo que le había dicho el misterioso personaje, guardando el secreto de confesión y quedó sordo del oído derecho para siempre.
!!!Cuanto daría yo por saber lo que le dijo¡¡¡
La curiosidad me corroe. Pero me temo que me voy a quedar con las ganas, igual que vosotros, al menos eso me temo.

martes, 8 de noviembre de 2011

El Greco

Que pena me ha dado cuando he visto el cuadro "La mujer del armiño", pero no la de Leonardo da Vinci, esa que hace unos meses trajeron al palacio de la Zarzuela para dejársela al Rey don Juan Carlos para que la admirase. La trajeron desde el Museo: Galería de Czartorsky, que creo que está en centro Europa pero no se donde. Bueno este cuadro se llama la mujer del armiño porque tiene este animalito entre sus brazos, pero yo me refiero al cuadro del Greco que se llama también así pero es de una bella mujer cubierta con un magnífico abrigo de armiño.
La señora a la que yo me refiero era toledana, paisana mía por cierto, y muy bella. Su señor padre, como ocurría por aquella época, le tenía preparado un novio sin que ella lo supiera.
Don Diego de las Cuevas cuando se enteró de que había llegado a Toledo un pintor de categoría...hizo lo propio, fue para que le pintara y como las sesiones eran largas, todos los días se llevaba a su hija, Doña Jerónima de las Cuevas. Como decía mi madre, "tanto va el cántaro a la fuente que al fin se rompe", pues sucedió que, la señorita Jerónima y el señor Domenico alias El Greco, se enamoraron.
Cuando se enteró don Diego, padre de la chica, puso el grito en el Cielo y prohibió que la nena fuese más a casa del pintor. Claro que la pareja se veía cuando les venía en gana y a escondidas, pero...Cuando el padre se enteró ¿Que hizo?. Pues lo que sabían hacer las gentes de esa época, que se creían muy listos, ni más no menos que meter a doña Jerónima en un convento.
Estando un día El Greco en su estudio pintando a su amada tal como la recordaba él, con un abrigo de armiño blanco, llegó la doncella de doña Jerónima con un niño en sus brazos y le dijo: Cuidad de él, es vuestro hijo, Jorge Manuel. Su madre, Jerónima de las Cuevas murió ayer, y su deseo es que Vos lo cuidéis.
Según estaba pintando el abrigo de armiño blanco, empezó a darle pinceladas de negro. (No existen armiños como este que pintó El Greco, todos son blancos)
No me digáis que no es triste.
!Que pena de época¡
!Si aquellas personas levantaran la cabeza¡
!Si vieran tantas madres solteras ahora que son queridas por sus familiares¡
!!!Cazurros¡¡¡ !!!Eran unos cazurros¡¡¡
Me voy a la cama con mal sabor de boca. !!!Pobres todos los que hallan sufrido ese trance¡¡¡

viernes, 4 de noviembre de 2011

Abuelas traviesas

También tenemos derecho las abuelas a hacer travesuras, antes las hicieron los hijos, después los nietos y ahora nosotras...Las abuelas.
Hoy después de mucho tiempo nos hemos reunido Piluca y yo (las dos abuelas más traviesas que halláis conocido), hacía más de tres meses que no nos veíamos y no por falta de ganas, si no, porque mi amiga ha estado todo este tiempo en su casa de la playa. Bien, por fin ha llagado el día tan esperado de vernos y que mejor diversión que irnos de compras.
Como a las dos nos gusta mucho hacernos nuestra ropa hemos empezado por buscar telas. Nos hemos ido a unos grandes almacenes para ver los tejidos de temporada y claro está hemos empezado mirando la sección de retales: Aquí empieza nuestra primera "diablura".
Cuando hemos llegado al montón de telas que allí había, estaba una señora revolviendo igual que pensábamos hacer nosotras. Esta señora tenía en sus manos un retal de tela estampada que ella miraba y miraba (la verdad es que dicho trozo de tela tenía "una pedrá" como dice Piluca). no era feo, era peor que feo. Ahora entramos nosotras en acción, tocamos el mismo retal que tiene la señora en la mano, ella lo suelta, nosotras lo miramos, lo tocamos, decimos que hay que ver que peso tiene la tela...la señora un poco mosqueada trata de recuperar su tela, nosotras seguimos diciendo lo bonita que es, la señora lo vuelve a soltar, pues quizá no está muy convencida. En ese momento lo cojo, me vuelvo hacia mi amiga, le digo:-Vamos al servicio y cuando salgamos lo cojo porque la verdad es que es una tela muy buena. Piluca me mira, se sonríe y como es más traviesa que yo...me sigue la corriente.
Cuando hemos salido del servicio, no estaban ni la señora ni el retal...ja ja ja.
Yo creo que El corte Ingles, que ha sido donde hemos estado, nos debía de dar comisión ya que esto lo hemos hecho varias veces y se han llevado lo que nosotras hemos querido. No negareis que somos buenas dependientas ¿verdad?
Después de hacer las compras que nos han gustado, hemos pensado que teníamos que comer, como las dos íbamos a coger el tren de cercanías, hemos pensado comer en el restaurante de la estación de Atocha. Bien, las dos de acuerdo.
Como habíamos charlado tanto, teníamos la boca seca y hemos decidido tomar un aperitivo, para ello nos hemos quedado en el salón anterior al comedor, nosotras seguíamos de cháchara y tomándonos nuestros refrescos cuando...
Vemos a una panda de jóvenes que venían del museo del Prado, se van al mostrador, vuelven a una mesa cercana a la nuestra y...vemos que traían unos riquísimos y enormes
"Bocatas" de no sé qué. Nosotras abrimos los ojos como platos y ni cortas ni perezosas miramos la carta de dichos bocadillos y vemos...Bocatatas...de esto, de lo otro y... de anchoas. Nos miramos las dos y ya se nos estaba haciendo la boca agua. Yo ya no me acordaba desde que no comía anchoas.
Entonces, las dos decidimos que vamos a comer dos hermosos y deliciosos bocadillos de anchoas.
Cuando nos sirven esos enormes bocatas de anchoas, no solo se nos hacía la boca agua...se nos caía la baba de gusto.
Después de comer, tomarnos el café y seguir charlando...lo menos nos hemos bebido 3 botellitas a agua y hemos comprado otra para el camino. De momento no hemos notado ningún malestar, pero si nos echáis de menos, preguntar por nosotras no vaya a ser que estemos en el hospital.