viernes, 31 de enero de 2014

Solo humor

Hoy cerramos el chiringuito de la semana con un poco de humor, pues bastantes cosas malas vemos por la televisión como para contar o leer cosas trágicas, mejor cosas que sean simpáticas.

Un carnicero estaba a punto de cerrar su negocio cuando vio entrar un perro. Trató de espantarlo, pero el perro volvió. Nuevamente intentó espantarlo, pero entonces se dio cuenta que el animal traía un sobre en el hocico. Curioso el carnicero abrió el sobre y en su interior encontró un billete de 50 euros y una nota que decía: ¿Podría mandarme con el perro 1 kg de carne picada de ternera y 1/2 de pierna de cerdo?
Asombrado, el carnicero tomó el dinero, colocó la carne en una bolsa y la puso junto al perro.
 El perro empezó a gruñir. Al darse cuenta, el carnicero puso el cambio del billete en la bolsa; el perro se calmó y salió del establecimiento.
El carnicero, impresionado, decidió seguir al perro. El animal fue hasta el primer semáforo, luego cruzó. Fue hasta la parada del autobús, con el carnicero siguiéndole de cerca. Cuando vio que era el autobús correcto, subió. El carnicero, boquiabierto, observó que el can erguido sobre las patas traseras, tocó el timbre para descender, siempre con la bolsa en el hocico. Perro y carnicero caminaron por la calle hasta que el animal se detuvo en una casa y golpeó la puerta. Repitió varias veces pero nadie le abría. En el colmo del asombro, el carnicero vio al perro, rodear la casa, saltar una cerca y dirigirse a una ventana. Tocó con las patas varías veces el vidrio y luego regresó a la puerta.
En ese momento, un hombre abrió la puerta...comenzó a golpear al perro. El carnicero corrió para impedirlo. diciéndole:
 "¡¡Por Dios, amigo!!, ¿Qué es lo que está haciendo?. ¡Su perro es un genio!...¡Es único!
El hombre muy molesto, respondió:
 ¡¡Que genio ni que narices!! Esta es la segunda vez en esta semana que al muy ladino se le olvidan las llaves...¡¡y yo en el maldito baño!!

Empleada del hogar...(no se de que país)
La empleada de una casa, después de tres meses de trabajo, se acercó a su patrona y le dijo:
¡Discolpa siñora, pero yo renoncio...!
¿Pero por qué?...si nosotros estamos contentos con tu trabajo, qué te pasa?
Bueno, es qui la problema ista in mi habitación.
Tu habitación?...pero que tiene?...si hasta la hemos remodelado!!!!!
Lo qui pasa is que al entrar, hay un litrero que dice: "El señor siempre está contigo" ¡Y eso no se cumple, él solo ha estado dos noches.!

Un matrimonio mayor.
Antonia, el domingo hacemos 40 años de casados y voy a matar un pollo.
¿Y que culpa tiene el pollo? Mata a tu primo Genaro que fue él quién nos presentó.!!!!

Feliz fin de semana....
       

martes, 28 de enero de 2014

La piel del cocodrilo

Una antigua leyenda de Namibia cuenta que, hace muchos años, el cocodrilo tenía la piel lisa y dorada como si fuese de oro.
Solía pasar todo el día bajo el agua y solo durante la noche salía a la orilla. En ese momento cuando la luz de la luna se reflejaba en su brillante piel, todos los animales de la sabana que iban hasta allí a beber se quedaban como hipnotizados mirando la belleza del reptil.
Pavoneándose de orgullo, el cocodrilo empezó a salir cada vez más a menudo durante el día y, aunque iba completamente cubierto de lodo, el sol empezó a castigarle la piel.
Poco a poco, su cuerpo quedó cubierto por la coraza de duras escamas pardas característica de estos reptiles.
Tras esta transformación, los otros animales dejaron de ir a beber durante las horas del día y ya no prestaron atención al cocodrilo.
El feroz animal, antes tan ufano de su piel, jamás pudo sobreponerse de semejante humillación y, consumido por la vergüenza, desde entonces, siempre que se le acerca alguien, se sumerge rápidamente en el agua dejando tan solo sus orificios nasales y sus ojos visibles en la superficie.
Y es que no hay que ser tan arrogante por algo tan fugaz como la belleza.

Aquí viene bien aquella frase que decía en una de sus obras la gran artista Lina Morgan..."Ay, como se quedan los cuerpos" Y si, eso es para todos. Todos perdemos la belleza y...¡pobre del que no llegue a feo!
Por cierto, Lina Morgan está muy malita, está en una UCI...recemos por ella...y por todos los enfermos.

sábado, 25 de enero de 2014

Un par de curiosidades

Cuando tenemos en nuestras manos algún objeto, medicamento o alguna receta de cocina, creemos que la hemos inventado en ese momento y nosotros, los de esta época nos creemos los más listos, pero no, no amigos, antes que nosotros ha habido alguien más inteligente y, nosotros nos aprovechamos de sus inventos. Por ejemplo:
LA PULSERA DE LA SUERTE
Estos brazaletes de encaje de la marca Cruciani se han puesto de moda ahora - los llevan desde princesas hasta cantantes muy famosas -, pero su origen se remonta al año 1955, cuando fueron creados por el grupo textil italiano de Arnaldo Caprai, padre del actual presidente de la empresa Cruciani.
Algo parecido sucede con los PETA ZETAS. Estos explosivos caramelos fueron fabricados por primera vez en 1956, por un científico de la General Foods (EEUU) y se comercializaron en 1975, con el nombre de Pop Rocks, aunque fueron retirados poco después. En 1979 el catalán Ramón Escolá, fundador de la empresa Zeta Espacial se convirtió en el único productor de esta "chuche" , que hoy se utiliza hasta en la alta gastronomía.

DESPUÉS DE INSTRUIRNOS UN POCO, AHORA VAMOS A REÍR...Que para eso es fin de semana.
Sale un gitano de un juicio acompañado por la guardia civil, en el momento que va a entrar en el coche celular le suena el móvil.
-¿Quien es?
-Manué, soy tu mujé ¿Cómo ha salío el juicio?
-¿El juicio?...siete años de cárcel o 100.000 euros.
Le dice la mujer - Manué, tu coge el dinero, no seas tonto.

Un cateto está en un juicio en el que está implicado en el robo de un coche, al terminar el juicio, el juez le dice:
Caballero queda usted totalmente absuelto por falta de pruebas, y dice el cateto:
-Entonces me "pueo"  "queá" con el coche  ¿o no?

Un lepero entra en una sala de fiestas y está actuando un ventrílocuo con un muñeco. El lepero se harta a reír con las gracias del muñeco. En ese momento el ventrílocuo empieza a contar un chiste de leperos, este se levanta y a voces le dice: ¡Y no te vayas a pasar con los leperos, eh!, mucho cuidado.
El ventrílocuo le dice: Perdone señor...
-Usted se calla, yo estoy hablando con el muñeco...

Mi respeto para los gitanitos, los catetos y mucho más a los leperos.

jueves, 23 de enero de 2014

Problema de vivienda

Creo que tengo suerte de tener buena memoria, me acuerdo de lo bueno, de lo malo y de lo peor. Claro que a veces viene bien recordar y más si lo que recuerdas lo has vivido casi en primera persona. Esto ocurrió cuando yo quizá tendría 15 o 16 años. Quizá alguien que lo lea se acuerde igual que yo:
Este caso fue muy comentado en su época. El auténtico protagonista era un miembo de la Policía Armada (ahora es la Nacional), su nombre propio no lo recuerdo pues mi padre cuando hablaba de él lo llamaba Panchito, que era como lo conocían todos los compañeros, sería un apelativo cariñoso.
Como ya he dicho muchas veces, mi padre era Policía Municipal, hacía servicio en la Puerta del Sol esquina a la calle del Arenal, por allí corrían los coches que daba gusto, hasta que mi padre les daba el alto para que pasaran los peatones, entonces no había semáforos.
Todas las tardes, los municipales, tenían media hora de descanso que aprovechaban para fumarse un cigarrillo y tomarse un café. Casi todos iban al cuartel de la Policía Armada que estaba en la Plaza de Pontejos, justo detrás de lo que hoy es el edificio de la Comunidad de Madrid. Dicho cuartel tenía un restaurante exclusivo para la policía y al que podían entrar tranquilamente los municipales. Allí fue donde mi padre conoció al bueno de Panchito.
En aquellos tiempo creo que nadie tenía piso propio, este señor al que me refiero, después de aprobar la oposición vivía de patrona, como tantos hombres jóvenes. También tenía una novia muy maja y lo que más deseaban ambos, era casarse cuanto antes.
El único problema era que no tenían casa donde encauzar su vida. El caso es que la cosa se enredó.
Un día la pobre patrona de "Panchito" pilla un resfriado de padre y muy señor mío. Se pasaba las noches tosiendo, con fiebre, no tenía apetito y no se cuantas cosas más.
Un amigo de estos que lo saben todo y no saben nada, le mete en la cabeza al policía la idea de que como se va a morir la patrona, que se case con ella y así cuando muera se queda con el piso, pues al viudo no lo podían echar de la casa.
A todo esto, la anciana cada día peor, el amigo azizañando a Panchito, Panchito desesperado porque estaba loco por casarse con su novia...total que, urden la trama...
Cuando le propuso el casamiento a la anciana, esta ni se enteró, el médico dijo que no pasaba de esa semana, así que aligeraron los trámites y...los casaron en articulo mortis.
No habían pasado ni cuatro días cuando doña... Nosequé, empezó a florecer. se le fue la fiebre, ya no tosía y se le puso la cara más hermosa que un sol cuando le dieron un caldito Maggi. Era el caldo de la época)
La desesperación de Angelina no tenía límites, entonces no existía el divorcio, y la anciana estaba la mar de contenta cuando se enteró que se había casado con aquel chico tan guapo.
Recuerdo que cuando llegaba mi padre por las noches y mientras cenaban, le contaba todos las novedades a mi madre. Mis hermanos y yo ya restábamos acostados, pero oíamos a mi madre reír y según supe, en el Cuartel de la Policía Armada...Había tal cachondeo...
Años más tarde hicieron una película que se titulaba "El Pisito" interpretada por José Luis López Vázquez, basada en aquel episodio.

lunes, 20 de enero de 2014

Todos somos necesarios

Todo y todos somos necesarios: Esto es lo que ocurrió en una carpintería:
Cuentan que en la carpintería hubo una vez una extraña asamblea. Fue una reunión de herramientas para arreglar sus diferencias.
 El martillo ejerció la presidencia, pero la asamblea le notificó que tenía que renunciar.
¿La causa?
¡Hacía demasiado ruido! Y, además, se pasaba todo el tiempo golpeando.
El martillo aceptó su culpa, pero pidió que también fuera expulsado el tornillo; dijo que había que darle muchas vueltas para que sirviera para algo.
El tornillo aceptó también, pero a su vez pidió la expulsión de la lija. Hizo ver que era muy  áspera en su trato y siempre tenía fricciones con los demás.
La lija estuvo de acuerdo, a condición de que fuera expulsado el metro que siempre se pasaba midiendo a los demás según sus medidas, como si fuera el único perfecto.
En eso entró el carpintero, se puso el delantal e inició su trabajo. Utilizó el martillo, la lija, el metro y el tornillo. Finalmente, la tosca madera inicial se convirtió en un lindo juego de ajedrez.
Cuando la carpintería quedo nuevamente sola, la asamblea reanudó la deliberación. Fue entonces cuando tomó la palabra el serrucho, y dijo:
"Señores, ha quedado demostrado que tenemos defectos, pero el carpintero trabaja con nuestras cualidades. Eso es lo que nos hace valiosos. Así que no pensemos ya en nuestros puntos malos y concentrémonos en la utilidad de nuestros puntos buenos".
La asamblea encontró entonces que el martillo era fuerte, el tornillo unía y daba fuerza, la lija era especial para afinar asperezas y observaron que el metro era preciso y exacto.
Se sintieron entonces un equipo capaz de producir y hacer cosas de calidad. Se sintieron orgullosos de sus fortalezas y de trabajar juntos.
Ocurre lo mismo con los seres humanos. Cuando buscamos defectos a los demás, la situación se vuelve negativa y tensa. En cambio, al tratar con sinceridad de percibir los puntos fuertes de los demás, es cuando florecen los mejores logros humanos.

jueves, 16 de enero de 2014

La maquina de escribir

La primera patente de la maquina de escribir tiene la friolera de 300 años, sin embargo tardó casi dos siglos en materializarse.
Ahora ya es difícil que alguien las use. Yo recuerdo cuando empecé a ir a clase de maquina. En la escuela había unas grandes mesas donde aprendíamos por turnos. Eran unas maquinas enormes de grandes. Después cuando empecé a trabajar en la oficina, me encontré con las mismas, esas Olivetti, Brother, Remington y la hermosa Underwood, esta fue la que más usé. Creo que esta era la más grande y teníamos que dar unos enormes porrazos a las teclas, de ahí el ruido que hacíamos cuando estábamos trabajando dos o tres mecanógrafas. Se comentaba, que las mecanógrafas escribiendo >> X<< horas, hacíamos la fuerza suficiente para mover un vagón de tren cargado con no se cuantos kilos. No se si esto fue comprobado. Yo aún en el teclado del ordenador, le "pego" de tal manera que mi hijo me llama la atención, dice que voy a traspasar el ordenado de tanto golpe... pero yo no me acostumbro de otra manera y sigo con mi ritmo...¡Dale que te pego!...pues bien.
El origen de estas maquinas, con las que se podía escribir más rápido que a mano, se remonta al 7 de enero de 1714, cuando la reina Ana Estuardo concedió una patente a Henry Mill, un ingeniero hidráulico inglés para el prototipo de la primera maquina de escribir.
Sin embargo, habría que esperar casi dos siglos hasta que Remington y Sons crearan en Nueva York, en 1873, la primera línea de producción industrial de maquinas de escribir.
Como esta empresa fabricaba maquinas de coser, las primeras de escribir iban montadas sobre sus mesas.
En esta época ya pocas habrá, pues todos estamos "liados" con los ordenadores, el que más y el que menos si tiene una la guarda como oro en paño por aquello del coleccionismo.
En casa hay una portátil la mar de maja, es una Hispano Olivetti, muchas veces pienso en deshacerme de ella pues está ocupando sitio, pero...¡¡¡Da una pena!!!

lunes, 13 de enero de 2014

Buen consejo del abuelo

Este abuelo que nos ocupa era el hombre más anciano de una tribu india y, estaba reunido con sus nietos a los que solía enseñarles cosas prácticas, como el arte de cazar, que frutos del bosque eran comestibles y cuales venenosos. Pero, en esta ocasión, les había juntado para contarles un secreto que quería compartir con todos ellos.
"¡Una gran pelea está ocurriendo dentro de mí"!, les confesó. "Es una lucha entre dos lobos. Uno de ellos es todo maldad, ira, violencia, dolor, envidia, avaricia, rencor, resquemor, orgullo, superioridad, mentira..."
Los pequeños abrieron los ojos como platos ante el retrato de este ser maléfico, el cual no podían jamás imaginar que habitase dentro de su abuelo. Y, sin poder esperar ni un segundo, le preguntaron: " ¿ Y como es el otro lobo?"
A lo que el anciano respondió:
"El otro lobo es luz, bondad, paz, amor, generosidad, entrega, amistad, compasión, verdad...Y, aunque no os deis cuenta, esa pelea ocurre también dentro de vosotros y de todos los seres de la humanidad".
Tras pensar unos instantes en ello, una de sus nietas se le acercó y le preguntó:
"¿Y cual de los lobos crees que ganará la batalla?"
A lo que el abuelo respondió:
"El que tu alimentes".

Como acabamos de estrenar un nuevo año, vamos a ver si podemos alimentar al segundo lobo, claro que a veces...

sábado, 11 de enero de 2014

Mi vecino el peluquero

Mi vecino Paco Pepe tiene una peluquería de caballeros que casi siempre está muy concurrida. Hace unos días mientras abría la puerta corredera de hierro le vi con la cabeza muy "gacha", me dijo que sentía mucha pesadez por lo que estaba cabizbajo y patitieso. Más tarde me entere lo que le había ocurrido:

"Un hombre mete la cabeza en la peluquería y pregunta:
¡¡-Peluquero!! ¿Cuánto tiempo le queda para que me pueda hacer un corte de pelo?
El peluquero, (mi vecino Paco Pepe) mira a su alrededor y, viendo la peluquería llena, le dice:
-Como dos horas.
Y el hombre se va.
Unos días después el mismo hombre vuelve a la peluquería y, desde a puerta, le pregunta al peluquero:
-¿Cuanto tiempo le queda para que me pueda hacer un corte de pelo?
El peluquero, (mi vecino Paco Pepe), mira al rededor de la peluquería y dice:
-Tal como tengo hoy el patio, como unas tres horas.
El hombre se va.
El peluquero, (mi vecino Paco Pepe) llama al aprendiz que estaba a puno de enjabonar la cabeza a un cliente y le dice:
-Oye, Manolo, ven p´acá...Mira, me sigues discretamente a ese señor que acaba de salir y ve a ver donde va, Lleva varias semanas que viene, pregunta en cuanto tiempo le puedo hacer un corte de pelo pero después nunca regresa. A la que veas donde ha ido, te vuelves cagando leches y me lo dices.
Un rato después, Manolo vuelve a la peluquería, riéndose histéricamente.
El peluquero, (mi vecino Paco Pepe) le pregunta:
-Manolo, ¿a donde fue el hombre después de pasar por aquí?
El aprendiz, con lágrimas en los ojos de tanto reírse, le dice:
¡¡¡ A TU CASA!!! 

¡Pobre Paco Pepe, no me extraña que no pueda levantar la cabeza!
Espero no herir vuestra sensibilidad si hay alguna palabra malsonante, pero es que, aunque no nos gusten son las que más gracia hacen.
                    -----
        Así rezan las mujeres:
Señor: Te pido SABIDURIA para entender a este hombre, PACIENCIA para soportarlo, BONDAD para tratarlo, AMOR para perdonarlo. y  no te pido FUERZAS, Señor, porque si me das FUERZAS...
¡¡¡LO MATO!!!




miércoles, 8 de enero de 2014

La soberbia es el camino que lleva al fracaso

¡Ya se han acabado las fiestas navideñas! ¡Ya han venido los Reyes Magos!...Yo, como siempre descontenta. No me han traído ni el chale, ni el abriguito de visón blanco, ni el automóvil con chofer uniformado...total...¡Tengo un mosqueo!
Bueno vamos a empezar a ser formales y centrarnos en la realidad.
Soberbios hay muchos, ojala les ocurriera lo que al señor de mi cuento...

Un representante del gobierno funcionario del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, visita oficialmente una finca y habla con su dueño, un campesino ya entrado en años.
El funcionario le dice al dueño que desea inspeccionar sus recurso acuíferos. El anciano le dice que perfectamente puede, pero le pide por favor no pase por el terreno cercado.
El representante, demostrando su autoridad, muy verraco, insolente, arrogante y bellaco, le dice:
Mire usted señor, yo tengo la máxima autoridad del gobierno que cabalmente represento, y este "CARNET" que ve aquí, este carnet, me califica para ir donde quiera, meterme en cualquier finca que me de la gana, sea esta de quien sea, sin preguntas y tampoco debo dar respuestas... ¿Me has entendido o es que no me he sabido explicar?
El viejo campesino se encogió de hombros y siguió con sus quehaceres.
Pasado un rato, el ganadero escucha unos gritos y ve al empleado del Gobierno corriendo, seguido muy de cerca por un enorme toro semental, negro, zaíno y meano. Vamos un Miura bien completo.
El toro va ganándole terreno y el tipo, visiblemente aterrado pide ayuda a todo pulmón.
El campesino de inmediato deja lo que estaba haciendo, corre hasta la cerca, gritándole a su vez:
¡¡¡El carnet...El carnet...!!! ¡¡¡Enséñele el carnet!!!

¡Cuánto tendrían que aprender estos "empleaduchos" de los buenos campesinos! ¡¡¡Ellos si que son sabios!!!
Un saludo a todos los labriegos.



viernes, 3 de enero de 2014

Enrique III de Castilla

Vanos a empezar el año con seriedad, así que vamos a prepararnos para saber, descubrir, llorar y algunas veces  reír. Hoy va una leyenda de un rey, que no por ser joven, era tonto.
Se cuenta que aquél día don Enrique III de Castilla fue de caza, aún era menor de edad y no debía ocuparse de los asuntos de gobierno. Anduvo por el monte acompañado de algunos nobles ricamente vestidos algunos, otros enfundados en brillantes armaduras. La jornada fue dura y cuando llegaron a palacio ya había asomado la luna por los espesos y oscuros montes castellanos.
Sudorosos se sentaron a la mesa y con gran sorpresa, un paje con cierto nerviosismo le informó que en palacio no había nada que servir, las despensas estaban vacías.
Para no quedarse esa noche sin cena, el rey mandó coger el mejor gabán de su vestuario y se llevara a empeñar a la judería para poder sacar algunos maravedíes que le permitieran aquella noche llenar su estómago.
Cuando por fin llegaron las viandas, observó que alrededor suyo solo se encontraban el mayordomo y un cocinero ya que como no había comida en palacio los sirvientes habían abandonado el castillo durante la ausencia del rey en la cacería. El rey comenzó a recapacitar y pensó que si sus arcas estaba vacías cómo sería entonces la vida se sus vasallos.
Preguntó a su criado con mucha insistencia y este le confesó muy secretamente que los regentes del reino eran como aves de rapiña, habían diezmado las arcas y los recursos de todos los vasallos para su propio provecho.
Asombrado el joven Enrique preguntó como podía obtener pruebas, el criado le respondió que uno de los regentes esa misma noche daba una fiesta en su castillo donde estaban invitados todos los nobles.
El rey después de meditar un rato confió a su criado el deseo de asistir a aquel banquete disfrazado para ver con sus propios ojos lo que ocurría.
Al cabo de una hora se presentó en ante las murallas del castillo disfrazado de pobre trovador.
Comenzó a tocar el laúd y muchos nobles comenzaron a escucharle atentamente, tanto fue así que fue  invitado a compartir un rincón de la opulenta mesa y allí comentó que era un pobre huérfano aunque de buena cuna, que sus tutores habían dilapidado sus rentas dejándolo empobrecido y se dedicaba a cantar en las mesas y callejuelas de Castilla.
El arzobispo y los demás nobles se indignaron al oír semejante historia y cada uno de ellos expuso el castigo que a su entender aplicarían a los indeseables tutores. el rey tomaba nota y poco a poco con el vino y la comida se desataron las lenguas  cada uno comento entre risotadas las artes de que se había balido para aumentar sus riquezas. Cuando terminó la fiesta, salió del castillo y se dirigió a palacio.
Decidió días después celebrar un banquete y convidar al mismo a todos los nobles del reino.
Cuando se sentaron a la mesa, su asombro fue grande cuando vieron que las mesas estaban vacías y solo había unos trozos de pan y un jarro de agua para cada uno. En la cabecera de la mesa estaba sentado el rey con su armadura de batalla y con una enorme espada desenfundada.
Se sentaron en silencio y aguardaron a que el rey rompiera con su voz tanto misterio, comenzaron a comer, aunque a más de uno se le atragantó el humilde pan campesino. Cuando terminaron el rey les hizo pasar a una sala donde había una especie de púlpito y las ventanas estaban tapadas con crespones negros. Al ver esto los nobles comenzaron a sentir temor. El rey con enérgica voz comenzó a imponerles a cada uno de ellos el castigo que hacía unos días habían impuesto para los dilapidadores de la fortuna del juglar, una vez hubo terminado, los aterrorizados nobles que se vieron descubiertos, observaron como decenas de soldados entraban armados y con ellos un sacerdote y un verdugo con una enorme hacha.
Los temerosos nobles perdieron la compostura y se arrojaron a los pies el rey pidiendo clemencia, implorando perdón e incluso llorando de terror al verse muertos con el cuerpo separado de su cabeza.
El rey tuvo piedad y les perdonó la vida a cambio de que devolvieran todo lo robado, no quería empezar su reinado con baño de sangre.
De esta forma el rey se ganó el calificativo de piadoso y justo y el respeto de sus nobles que dejaron de verle como un joven inexperto.
¡Y digo yo! Don Enrique, era casi un niño. ¿No hay ahora un hombre que haga algo parecido y que nos devuelvan lo que han robado?