Dos de mayo

Hoy han ocurrido muchas cosas en Madrid pues ha sido el día de la Comunidad Madrileña. Se ha celebrado como corresponde a una Ciudad como Madrid, que recuerda a sus hijos, muchos de ellos fueron héroes en aquél fatídico día 2 de mayo de 1808, aquellos como Daoiz y Velarde, dos capitanes de artillería que cayeron defendiendo Madrid de las hordas de Napoleón, Manuela Malasaña, una jovencita de 17 años a la que culparon de traición simplemente porque llevaba unas tijeras en el acerico, ya que era modista, y los soldados de Napoleón pensaron que con semejante "arma" iba a matar a todo un regimiento.
Tanto las modistas como las bordadoras, e incluso cualquier mujer que sepa coser, todas tenemos un acerico lleno de agujas y alfileres y una tijera, de los cuales no nos separamos, ese fue el motivo por el que acusaron a Manolita Malasaña de guerrillera.
A los que también han honrado ha sido a todos los madrileños que el día 11-M. del 2004, también se portaron ayudando en todo lo que podían a los heridos en aquel maldito atentado que tantas lagrimas nos ha hecho derramar.
Pasando a héroes vivos, tenemos, entre otros, al padre Ángel. Le han concedido una medalla por su bien hacer entre los necesitados. Empezando por los niños, los ancianos, las mujeres desamparadas y no se cuantas cosas más. Ahora es el Excelentísimo y reverendísimo...Padre Ángel.
Como además de ser un hombre bueno y santo que siempre tiene la sonrisa puesta. Cuando les han ofrecido un aperitivo, no se le ha ocurrido más que decir: -Me he acordado de los que tienen los frigoríficos vacíos. ¡Que grande es el padre Ángel!
También han condecorado a Monseñor Rouco Varela, al fallecido Luis Aragonés, a un chef jovencísimo que ya tiene tres estrellas Michelin por su bien hacer en sus restaurantes, al Museo del Prado, que por cierto, su director ha dicho un discurso magnifico. Ha hablado de la solidaridad de los madrileños, nativos y de adopción, y es que aquí todo el que viene...se queda y se comporta como un madrileño más.
Después ha habido una parada militar, estaba la Puerta del Sol, como diría un taurino, "de durse".
Yo me lo he pasado muy bien, como madrileña, aunque nacida en Toledo, ningún año me pierdo la fiesta. Claro que no todo ha sido alegría, pues también hemos echado nuestras lagrimitas. Además, después de estar unos días un poco pachucha, ya que me han hecho una endodoncia, parece que hoy me he mejorado.
Ya no me queda más que dar la enhorabuena a los galardonados, felicitar a los madrileños y a los que no lo son y, si todavía alguien no ha estado en Madrid, que no le deje para más tarde.
También quiero felicitar a mi madre que hoy hubiese cumplido 100 años aquí en la tierra, pero seguro que lo está celebrando en el cielo.