"Señor. quiero padecer por Tí, déjame ocupar Tu puesto, quiero reemplazarte en la cruz"
Se quedó fijo esperando respuesta. El Señor abrió los labios y hablo con palabras sobrantes. "Siervo mío accedo a tu deseo con una condición"
-¿Cual Señor? ¿Es una condición dificil?
-Escucha...suceda lo que suceda y veas lo que veas, has de guardar silencio. Haakon contestó: ."!Os lo prometo Señor"! Y se efectuó el cambio. Nadie reconoció a Haakon colgado en la cruz. El Señor ocupaba el puesto de Haakon.
Un día llegó un rico y despues de haber orado. dejó allí olvidada su cartera, Haakon vio y calló. Tapoco dijo nada cuando un pobre que vino dos horas después, se apropió de la cartera del rico. Tampoco dijo nada cuando un muchacho se postró ante el para pedirle su gracia antes de emprender un largo viaje. Pero en ese momento volvió el rico en busca de su cartera. Al no hallarla, pensó que el muchacho la tenía y dijo: -¡Dame la cartera que me has robado!"
El joven dijo: "¡ Yo no he robado ninguna cartera!" "¡No mientas devuelmela"! Le repito que yo no he cogido ninguna cartera! El rico arremetió contra el jóven. Sono una voz fuerte. "Detente". El rico miró hacia arriba y vio que la imagen le hablaba. Haakon no pudo permanecer callado, grito defendiendo al jóven e interpelando al rico por la falsa acusaciòn. Se quedó anonadado y salió corriendo, el joven se fue también con prisa para emprender su viaje. Cuando la cruz quedó sola, Cristo se dirigio a Haakon y le dijo:
-"Baja de la cruz. No sirves para ucupar mi puesto. No has sabido guardar silencio."
-Pero Señor ¿Como iba a permitir esa injusticia? Jesús ucupó la cruz de nuevo y Haakon quedó ante la cruz y el Señor le dijo.
-"Tu no sabías que al rico le convenía perder la cartera, pués llevaba en ella el precio de la virginidad de una joven. El pobre tenía necesidad e hizo bien en llevarselo. El muchacho que iba a ser golpeado...sus heridas le hubiesen impedido realizar el viaje que para el iba a ser fatal. Ahora, hace unos minutos, acaba de zozobrar el barco en el que ha perdido la vida, Tú no sabías nada...Yo si...Por eso callo...El Señor nuevamente guardó silencio.
Muchas veces nos preguntamos:¿Por que Dios no nos contesta...Dios nos responde aún con el silencio. En su silencio nos dice con amor, confiad en Mi...¡¡SE BIEN LO QUE DEBO HACER!!
Esto se lo dedico a alguien que me ha preguntado enfadado. ¿que es lo que hace Dios ante las catastrofes...yo le digo. El sabe lo que hace y porque...