Yo estaba tan tranquila en casa. Puse mis lentejas y a eso de las 12 y algo,(tengo que decir que de vez en cuando iba a la cocina a ver las susodichas lentejas), en uno de esos viajes, veo con horror que la cocina de cocinar estaba apagada. Lo primero que hago, fue ir a ver el cuadro que hay en el recibidor a ver si se habian fundido los "plomos".
Como no era, o yo no sabía. Veo que todo está bien. Miro a ver si la luz de la escalera está bien, toco el ascensor, toco el timbre de la vecina, en fin, que toco todo lo que hay que tocar...mientras mis letejas ha parado de cocer. Las miro y las remiro. Mientras tanto espero que venga mi hijo que estaba trabajando en casa y había salido a no se que...
Ya llega por fin y me dice que no solamente estamos sin luz nosotros, sino que toda España, Portugal y Francia esta sin la maldita luz que tanta falta nos hace que se lo ha dicho el jardinero...resultado, estamos incomunicados...
Lega la hora de comer y...no tenemos luz, ni podemos poner la tv, ni podemos llamar a la vecina del 4º...total, nada de nada.
Decidimos comernos las lentejas, menos mal que les había puesto un trozo de panceta de "marrano" muerto un un chorizo y, eso comimos. Las lentejas estaban un poco duras, pero cuando hay hambre "no hay pan duro".
Hoy todo es normalidad, mi hijo sigue trabajando en casa y los vecinos todos están bien.
Como ha sido el día del libro y para que todos sepan que estamos bien, les pongo unos versos que seguro recordaran y que son de una autora muy conocida.
DON LIBRO ESTA HELADO
Estaba el señor don libro
sentadito en su sillón,
con un ojo pasaba la hoja
con el otro ve televisión.
Estaba el señor don libro
aburrido en su sillón
esperando a que viniera...(a leerle)
algún pequeño lector.
Don libro era un tío sabio,
que sabía de luna y de sol,
que sabía de tierras y mares,
de historias y aves,
de peces de todo color.
Estaba el señor don libro,
tiritando de frío en su sillón,
vino un niño, lo cogió en sus manos
y el libro entró en calor.
autora...
Gloria Fuertes