Suena el teléfono, y aunque yo no lo cojo, por aquello de los "timos", pero como está mi hijo y me dice quien es, enseguida me da paso. Es mi muy querida amiga Juanita, que solíamos salir juntas a comer, de compras...pero desde que llegó la Pandemia, todo se fue al traste. Hoy os voy a contar su historia.
Las dos estamos jubiladas, las dos tenemos hijos y nietos, por lo tanto, nos contamos muchas cosas de ellos y de nuestra juventud, etc,etc.
Una de las cosas que me contó fue., como salieron de su pueblo natal y emigraron a Madrid.
Vivían en una finca de labranza, por lo que deduje que debían de ser mediros, como se les llamaba en algunos pueblos a los que estaban a cargo de una finca. Sus padres sembraban, abonaban, escardaban y recolectaban y cuando tenían a punto la cosecha...llegaba el señorito de turno...y se lo llevaba.
Me contó que aún siendo una niña le decía a su padre:
-Padre, no deje usted que se lleve todo, que nos deje por lo menos algo para volver a sembrar. ¿No era una niña encantadora, además de lista?
Su padre, el pobre hombre, no se atrevía a decir nada y así iba pasando el tiempo. Juanita era la mayor de sus hermanos y cuando cumplió 14 años, le dijo a su madre:
-Busquemé una casa aunque sea de niñera, yo no quiero ver más como vienen a llevarse el trabajo nuestro de todo el año y apenas si nos queda para seguir vivíendo.
-Su madre le ayudó, la mandó a Madrid y como debía de ser muy lista...al poco tiempo mandó llamar a sus hermanos y,,,con el tiempo vinieron sus padres y todos se instalaron con bien.
Supongo que despues estudiaría, pues ha estado trabajando en un laboratoria donde hacen las prótesis dentarias y todos sus hermanos muy bien situados. Sus hijos tambien han estudiado carreras universitairas...¿A que es un final precioso? casi parece una película. Otro día os contare la historia de otra amiga...la mía no, pués no quiero que lloréis.
Mientras llega mi bebé (40 años), me voy a echar una partidita a la Brisca con el Ordenador. ¿Sabéis una cosa? Casi siempre gano.
Con fuerza de voluntad y algo de suerte se consigue mucho. Un beso
ResponderEliminarA eso se le llama superación y es digno de admirar que a los 14 años ya decidiera hacerlo. Eso de que siempre ganas a la brisca es sospechoso ¿ No se jugar a la brisca pero a veces hago solitarios con las cartas y confieso que si que hago alguna trampilla para ganarme a mi misma. Besicos
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