No quería, o mejor dicho, quería dar un respiro a mi blog sin hacer caso a Juan por lo menos... medio año. Se lo he dicho pero, cuando me ha mandado ayer domingo un correo con el tema de hoy, no he podido por menos que darle las gracias pues nos viene, como diría mi madre, "al pelo". Por lo menos en mi País, no se lo que sucederá en otros sitios, pero aquí, creo que hay muchos políticos como el Vampiro que tenemos cerca.
Ya le he dicho a Juan que este es el último "cuento" que publico (por ahora), que quiero contar muchas cosas que tengo en la cabeza y él no me deja. ¿Sabéis que me ha contestado? Pues que todos los alumnos de la Universidad me leen gracias a él. (el "niño" es presumido). Digo niño porque puede ser mi hijo. De eso se aprovecha, le quiero y él lo sabe.
Bueno, empecemos con el murciélago.
Hace tiempo, las aves y los mamíferos entraron en guerra y el resto de animales se posicionaron en uno de los dos bandos.
Sin embargo, el murciélago, llevado por su cobardía, no sabía por quien apostar. Pensó que los mamíferos eran más fuertes y se presentó ante el león.
-Como ves, soy pariente del ratón. Por favor, déjame unirme a vuestro bando. Lucharé y arriesgaré mi vida si es preciso, dijo.
El león lo aceptó.
A la mañana siguiente, las aves les atacaron con piedras. El murciélago, temeroso de la derrota, voló hasta el águila real.
-Como puedes ver por mis alas, soy un ave. Me gustaría luchar contra los mamíferos con vosotros, arriesgaré mi vida por ello si hace falta, afirmó.
El águila lo admitió.
Al día siguiente, los mamíferos contraatacaron con dureza y el murciélago volvió a unirse al grupo, y cuando las aves se hicieron otra vez con el poder, se cambió de nuevo.
Tanto las aves como los mamíferos se dieron cuenta de la cobardía del murciélago.
Esto les llevó a comprender que era una tontería luchar entre ellos y se hicieron amigos, pero dejaron fuera al murciélago, que quedó solo y vivió oculto en las grutas.
Sólo salía por las noches, cuando nadie le veía.
Y es que, quien cambia de bando continuamente según le conviene puede acabar sin amigos.
Aprovecho para dar las gracias a todos los que me seguís por Facebook. Me hace mucha ilusión ver los emoticonos que ponéis. No pongo nombres por si no os gusta.
Muchas gracias a todos.
Hay quien sabe estar en los dos bandos. Un beso
ResponderEliminarMuchas más de los que pensamos.
EliminarUn beso Susana.
Pues si.No se puede hacer lo del murciélago y arrimarse solo al sol que más calienta por interés, así le pasó. Un abrazo.
ResponderEliminarY eso les tenía que pasar a los que hacen doblete.
EliminarUn abrazo Rita.
Muy buena esta historia del vampiro y cualquier parecido con la realidad no es ninguna coincidencia.........Es la pura realidad.Tengo ganas de leer una historia tuya sin menospreciar para nada las historias de tu amigo Juan.Besicos
ResponderEliminarTe doy toda la razón, coincide con muchos políticos de ahora y de siempre.
EliminarUn besito Charo.
M e
ResponderEliminarU no sin
R eparo.
C ambio e
I ntercambio hacia
E l sol que más caliente.
L uego
A ndo sin rumbo, a
G atas.
O scuro destino en una cueva abandonada.
Más de uno debería estar en esa cueva.
EliminarUn abrazo Manuel.
Ay Ma de los Ángeles, por acá hay muchos "murciégalos" como decía mi hijo cuando empezó a hablar. Debe ser un mal mundial!No sé cuál será el consejo de Juan, pero por favor, seguí contándonos tus historias! Un abrazote!
ResponderEliminarSeguro María Cristina que hay muchos por todas partes.
EliminarUn abrazo
Ah, y muy bueno el acróstico de Manuel Díaz!
ResponderEliminarGracias en nombre de Manuel, seguro que lo ve y le gusta.
EliminarOtro abracito María Cristina.
Holaaaaa, amiga muy bueno tu escrito, yo creo que en todas partes hay murciélagos, como los que tu describes querida. Un abrazo grande te había extrañado, espero sigas escribiendo eres muy buena para contar historias.
ResponderEliminarMuchas gracias amiga Gladys. Yo tembien te he echado de menos y como bien dices, hay murciélagos por todas partes.
Eliminarespero que sigamos en contacto.
Un fuerte abrazo.
Me ha gustado. A mí me hacen gracia los murciélagos.
ResponderEliminarUn abrazo.
los auténticos son muy bonitos, a mi tambien me gustan, los otros...
EliminarUn abrazo Alfred.
Tu murciélago político es la verdad al desnudo, en este nuestro país, se cambia de bando, como de ropa, según se vean cuantos euros se pueden llevar en sus bolsillos, es denigrante nuestra situación de los partidos políticos, pero es lo que hay, esperemos que algún día las cosas cambien... PARA MEJORAR.
ResponderEliminarDede el corazón, un abrazo
Creo que siempre los ha habido y siempre los habrá. De esta gente no nos podemos librar, aunque esperemos a ver si mejora la cosa.
Eliminarun fuerte abrazo Ángeles.
Muy interesante, murciélagos asi los hay en todas partes.
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Tienes toda la razón del mundo. Claro que los del mundo animal son bonitos y útiles, los otros....
EliminarUn abrazo Sneyder.
Aunque puede coincidir con un par de políticos españoles, yo me pienso que es uno al que le llaman "El veleta", que se está poniendo medallas a todas horas, y que al final, y por mucho que disimule, ha pactado con la ultra derecha.
ResponderEliminarBueno, dejemos la política aparte, y con todos mis respetos, a ver si Juan, se moja un poquito algún día con estas fábulas, porque así, tal como lo cuenta, sin moraleja final, el tema da para mucho. Jeje.
Un fuerte abrazo, amiga.
Pues yo tampoco se quien es "El veleta", no lo capto y la verdad es que ya no sabemos por donde tirar.
EliminarA Juan le voy a dar un respiro, o mejor dicho, que me lo de él a mi.
Un fuerte abrazo Manuel.
He visto el comentario en mi blog. Me hubiera gustado contestarte en privado pero tampoco encuentro tu correo. El mío lo tienes en el mismo blog, es este pilarcobisa@gmail.com
ResponderEliminarBueno, paso a contarte. Lo de señorita Rita es por el dicho que decimos cuando no queremos hacer nada "¡Qué trabaje Rita!". Y es que me acabo de retirar del trabajo y estoy tan a gusto, viviendo la vida feliz y haciendo lo que me apetece en cada momento.
Lo del libro que has escrito con ese nombre me parece fenomenal y te agradezco que me lo digas porque me encantan las historias de la guerra, y si son verídicas mucho mejor. Yo también he escrito un libro- cuento contando la historia de mi familia, de mis padres y abuelos , en aquel periodo de sus vidas que tanto les marcó.Es un relato de andar por casa, ya saber que no soy escritora profesional ni se hacerlo bien, pero me entretengo con ello y es una especie de homenaje a mis mayores y de legado que dejo a las generaciones que nos van sustituyendo.
Me pasaré a leer el tuyo en seguida. Seguro que me va a gustar mucho.
Si me envías algún mendsaje por correo, podré localizar el tuyo. Besitos.
Espero haberlo hecho bien y hayas cogido mi correo.
EliminarUn beso Pilar.
Que tengas buen fin de semana
ResponderEliminarAunque ya está finalizando, espero que tu tambien hayas descansado y pasarlo bien. Yo, después de esta mañana haber ido a misa, la tarde la he pasado en casita bien calentita pues está haciendo mucho frío.
ResponderEliminarUn abrazo Trini Altea.