lunes, 28 de agosto de 2023

Toledo


Catedral de Toledo 

    Me ha encantado esta leyenda, o sea, "La ajorca de oro", en una de las muchas que tiene Toledo y como no quiero quedármela para mi sola , pues nada, voy y la cuento por si alguno no la sabe.

          Empezamos en uno de los edificios, si no el más emblemático, como es la famosa Catedral de Toledo. Este inmenso monumento está cargado de historias y leyendas. Pero si tuviéramos que destacar una, sería "La ajorca de oro", que nos la cuenta Gustavo Adolfo Bécquer.

           La leyenda nos narra la historia de María Antúnez, mujer que escritor describe como caprichosa y que siempre deseaba llevar las mejores prendas y joyas para llamar la atención entre los vecinos de la ciudad de Toledo.

          Cuentan que su enamorado, Dos Pedro Alfonso de Orellana, se la  encontró llorando una tarde. Ella le confesó que, habiendo estado en el templo, donde se celebraba la festividad de la Virgen, se había enamorado, más que de la belleza que la imagen desprendía, de la ajorca que la Virgen lucía en su brazo. Ante esto, y para complacer a su enamorada, Don Pedro no tuvo más remedio que ceder a la petición de su enamorada, de que entrara en la Catedral a robar tan preciada joya y se la regalara. Cuenta Bécquer que, cuando aprovechando el silencio y la oscuridad que le regalaba la ciudad, se adentró entre  entre los muros del edificio.

          Caminando por las inmensas naves, temeroso de las sombras que proyectaban los pocos cirios encendidos y que parecían seguirle, al fin llegó ante la imagen de la Virgen del Sagrario. Valiéndose de fuerza y valentía, pero al mismo tiempo temeroso por lo que iba a hacer, logró colocarse a su altura y, estirando el brazo, logró arrebatarla tan ansiado brazalete.

          El problema vino despues. Cuando se giró para salir corriendo de la catedral con su objetivo cumplido, todas las estatuas, con sus ropajes, se habían bajado de sus peanas y lo rodeaban, junto con los esqueletos procedentes de la cripta, Todos querían evitar tan malvada fechoría.

          A la mañana siguiente, cuando abrieron el templo, encontraron a Don Pedro, tirado en el suelo, completamente enloquecido y gritando: ¡suya es!, al mismo tiempo que alzaba con la mano el brazalete de oro.


Espero que os haya gustado tan bonita leyenda.

15 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Hay micha gente que no la conocía, yo la descubrí hace poco.
      Un beso Susana.

      Eliminar
  2. Pues fíjate que me leí hace años las leyendas de Bécquer y esta no la recordaba, será cuestión de volverlas a leer aunque pase mucho miedo.Besicos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo la vi de casualidad. Espero que se te haya pasado el miedo.
      Un besito querida Charo.

      Eliminar
  3. Entre los caprichos de María y el tonto de Pedro cada uno recibió su merecido, una historia con enseñanza, un abrazote Ma de los Angeles!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que el pobre hombre era algo más que tonto, ya no hay hombres de esos.
      Tengo mas...
      Un abrazo bien fuerte María Cristina.

      Eliminar
  4. Respuestas
    1. Hay muchas leyendas que os gustan a todos. Yo tampoco la sabía.
      Un fuerte abrazo Matías.

      Eliminar
    2. Amigo Matías, he entrado en tu blog y no he podido leerlo, no se si es cosa de mi ordenador, veía todo en amarillo y las letras blancas, el título es "Calor calor". Lo siento pues me gusta mucho lo que escribes.
      Otro abrazo

      Eliminar
  5. No la conocía.
    Feliz finde y un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola LOBEZNA, que tu tambien tengas un buen fin de semana, el primero de septiembre.
      Respecto a la leyenda, me alegro que te haya gustado, yo la he descubierto hace poco.
      Un fuerte abrazo querida amiga.

      Eliminar
  6. Buenas noches, María De Los Ángeles.
    Me ha resultado interesante tu esplicacion de esta leyenda. Contigo siempre se aprende cosas nuevas cuando escribes. Gran profesora de tu blogger, sin duda.
    La fotografía de la Catedral de Toledo es muy bonita.
    Un abrazo
    Mónica

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Las fotografías las cojo de Internet, como verás yo no tengo ningún mérito.
      Algunas de las leyendas me las se porque como bien sabes leo mucho y despues las cuento por si alguno no las sabéis,
      Te mando un beso bien grande querida Mónica.

      Eliminar
  7. Una leyenda interesante que tampoco conocía. Espero más. Besos.

    ResponderEliminar
  8. Pues amiga Teresa, con mucho gusto las iré poniendo poco a poco.Un beso.

    ResponderEliminar