Hoy mi entrada va dedicada a las mamás. Yo ya no la tengo, pero la recuerdo todos los días. Ya sabéis que he sido la mayor de siete hermanos, por eso recuerdo tambien cada día y hora que mi madre venía con un nuevo hijo y hermano de alguna Maternidad. Ya había recorrido varias, pero la que más recuerdo es una que había en El Puente de Vallecas, pues ahí vivimos muchos años... vamos con lo que nos ocupa...
Una de las veces que fuí a ver a mi madre, estaba un sacerdote que me contó una bella historia, que a la vez os la cuanto yo...
Una mujer joven era conocida en el hospital, pues dió a luz varios hijos a los cuales daba en adopción. Por este motivo casi no se intesesaba por los niños pues la maternidad ya tenía preparados a los padres adoptivos.
Me contó este buen sacerdote, que cuando dió a luz la última vez que la vieron era un niño precioso y lloraba más que Jeremias, no paraba. Lloraba en el nido, lloraba cuando le cambiaban y lloraba siempre. El niño estaba sano y además era muy hermoso.
El cura fue al nido, cogio al bebé y lo llevó a la cama de su madre, le dijo: -Dale de mamar. La madre dijo que no y no quería verlo. El reverendo (como yo le llamo), insistió y vovió a decirle que no pasaba nada, que sólo le diera de mamar pues faltavan dos horas para que llegasen su "padres". Tanto insistió el buen sacerdote, que la buena mujer cogió al niño, se lo colocó en posición, sacó un pecho y se lo arrimó. El crio se agarró a él como a una tabla de salvación, empezó a succionar y a tragar. El cura dijo: -Ahora vuelvo.
Cuando volvió, esta mujer, no sabemos los motivos que había tenido para ceder a sus hijos, llamó a la enfermera y le dijo que se quería ir a su casa y tambien que se llevaba a su hijo.
Fue el médico, el cura, los futuros padres que ya habían llegado...pero nada, solo dijo que no daba a nadie más hijos.
Esta es la fuerza y el sentir de una madre cuando amamanta a un hijo. Los hijos que maman tambien tienen esa comunicación con sus madres aunque no lo parezca...siguen a ellas sin ellos darse cuenta.
Este buen sacerdote, era el Capellán de la Maternidad de O `Donell
Que bonita historia, esta vez el instinto maternal cumplió muy bien su tarea. Besicos
ResponderEliminarYA LO CREO QUE CUMPLIÓ SU TAREA QUERIDA CHARO, CON CRECÉS LA CUMPLIÓ. LO QUE ME GUSTARÍA...
EliminarSABER ES SI TUVO MAS HIJOS..UN BESITO.
El instinto materno filial es muy fuerte.
ResponderEliminarBella historia.
Un abrazo.
YA LO CREO AMIGO ALFRED. LO DIGO POR EXPERIENCIA.
EliminarQUE TENGAS UN BONITO FIN DE SEMANA. UN ABRAZO.
Bonita historia. Un beso
ResponderEliminarME ALEGRO QUE TE HAYA GUSTADO.
EliminarUN BESO QUERIDA SUSANA.
Una historia conmovedora, Ma de los Angeles, y con un final muy feliz, un abrazote!
ResponderEliminarNO TENÍA POR MENOS QUE AGRADECERTE TU COMENTERIO. MENOS MAL QUE EL BUEN SACERDOTE LE ECHÓ UNA MANITA.
EliminarY ES QUE DESPUES DE DAR DE MAMAR A UN HIJO...NO SE OLVIDA
UN ABRAZO MARÍA CRISTINA.
Olá, Maria, mas que história maravilhosa, mas começou muito triste.
ResponderEliminarTerminou linda, a força da maternidade falou alto!
Ver uma mãe doando um filho é das coisas mais tristes que podemos ver...
Parabéns, Maria, uma feliz semana,
um beijo!
TIENES RAZÓN TAIS, ES MUY HERMOSO TENER UN HIJO. LA MADRE DE ESTA HISTORIA FUE MUY VALIENTE
EliminarACOMPAÑADA POR EL SACERDOTEQUE FUE MUY LISTO.
QUE TENGAS UN BUEN FIN DE SEMANA Y QUE LO PASES MUY BIEN.
UN BESO,
Aunque no sabemos las causas del porqué esta madre vendía a sus hijos, es muy triste saber, que tuvo que intervenir un sacerdote para que se diera cuenta de lo que es ser una "Madre" de verdad. no una máquina de parir como lo había sido hasta entonces.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amiga María de los Ángeles.
SUERTE TUVO ESE NIÑO QUE DIÓ CON EL BUEN SACERDOTE Y QUE ESTABA ALLÍ EN AQUEL MOMENTO.
EliminarNO SOMOS NADIE PARA JUZGAR, SI LOS DEJÓ FUE POR ALGO. YA TUVO QUE OCURRIR QUE ESTE BUEN CURITA LO SABÍA.
UN ABRAZO AMIGO MANUEL.
Ese hijo tuvo suerte con su madre, pero los otros que tristeza. Muchos besos.
ResponderEliminarA LO MEJOR TAMBIEN TUVIERON ESA SUERTE. EL CASO ES QUE NO SABEMOS LOS MOTIVOS.
ResponderEliminarUN BESO AMIGA TERESA.
El instito maternal es lo más bonito que se tiene en la vida.
ResponderEliminarPreciosa historia, María de los Ángeles. Una madre lo es todo.
Un abrazo.