martes, 22 de abril de 2014

Las maletas

Ya se nos ha pasado la Semana Santa, ahora estamos un poco tranquilos, hasta otro "puente". Otro puente que no va a tardar mucho en llegar pues hoy en la peluquería ya estaban cogiendo fechas pues, la próxima semana vuelven a cerrar " el chiringuito" otros cuatro días, Después nos quejamos de que hay crisis, ¿Cómo no la va a haber? Si trabajamos menos que la chaqueta de un guardia (según dicen, la chaqueta de un guardia siempre esta colgada ya que este va de uniforme), pues bien, eso hacemos nosotros, trabajar poco y quejarnos mucho.
Estos últimos días se han visto por estaciones de ferrocarril, de autobuses y aeropuertos, infinidad de viajeros acarreando sus equipajes, que dicho sea de paso, son la mar de cómodos, no como en otros tiempos y, es que hasta hace bien poco, el ser humano iba cargado como verdaderos burros con las "maletas", bien al hombro, cogidas de la mano e incluso arrastras.
Si miramos un poco atrás, no mucho, pues hasta hace más o menos diez años, todavía cogíamos las maletas como podíamos, ya que su peso era excesivo, nos daríamos cuenta del gran invento de haberlas hecho tan livianas.
En libros películas, leemos y vemos que el equipaje se componía de unos grandes baúles o arcones de madera en los que llevaban los hermosos vestidos de la época. Claro que los cargaban los criados. Y si nos remontamos un poco más atrás, eran incluso de hierro. ¡¡¡Pobrecillos!!!
¡Claro, que, para eso estamos nosotros aquí! Los del siglo XX y XXI, si, si, los más "listorros".
Ahora se ven unas maletas que solo con darlas un empujoncito...salen corriendo. Además son de materiales poco pesados, con ruedas, un asa larga para que no tengamos que agacharnos, en fin, que ahora da gusto meter todo lo que quieras llevarte para tus vacaciones.
Yo además de mi ropa, zapatos y demás zarandajas, meto en la maleta una plancha. Mi hijo siempre me dice lo mismo, ¿Dónde vas con al plancha?
Y es que el, con meter un pantalón vaquero roto y tres camisetas ya tiene bastante, Pero el no se da cuenta de que yo soy de otro siglo, me gusta ir con ropa limpita y planchadita, como hacíamos todas las mujeres de "antaño" y algunas seguimos haciéndolo.
Hace unos días cuando le dije que había tirado mi maleta porque ya estaba muy usada, me ha dicho que me regala la suya, pues con una más pequeña se apaña.
Y es que los jóvenes de ahora, meten como digo antes, un vaquero (si está roto mejor), unas camisetas, un poco de ropa interior y, pare usted de contar.
¡Que listos han sido los que inventaron las maletas suaves y además con ruedas!
¡Vaya mi reconocimiento y agradecimiento!

2 comentarios:

  1. Ves Ma de los Angeles? Con un tema re- sencillo hiciste un relato re- entretenido! Sos una maestra, gracias por entretenernos, un abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Eres un encanto María Cristina. Siempre pienso en poner cosas que sean agradables y distraídas, muchas veces no pongo cosas más extensas, pues pienso que quizá no queráis leer textos que sean largos, creo que voy a poner algo, como hacen algunos amigos, que continúe al día siguiente, de ese modo escribiré con más libertar. Si lo hago, espero que no se aburran mis seguidores. Jajaja.
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar