Este zar de mi cuento el pobre estaba pachucho, o sea, muy enfermo y preocupado por los malos pronósticos que le habían dado sus doctores.
Reunió a sus súbditos y les dijo:
-Daré la mitad de mi reino a quien me cure.
Los sabios de la corte se reunieron a deliberar, pero por más vueltas que le dieron a sus sabias cabezas, no encontraban la solución.
De repente uno de ellos se levantó y les propuso lo siguiente:
-Si encontramos a un hombre feliz, que le compren la camisa y que el zar se la ponga. Eso le curará.
Enseguida salieron de palacio emisarios en busca de ese hombre feliz, aunque no aparecía por ninguna parte.
Unos eran ricos pero estaban enfermos; otros gozaban de una salud de hierro, pero eran pobres como las ratas; también los había que, ricos y sanos, se quejaban de su mujer o de su hijo...
Una tarde que el hijo del zar había salido a cazar con unos amigos, pasó delante una humilde cabaña y escuchó lo siguiente:
-Hoy he trabajado y he comido bien. Me puedo ir a la cama satisfecho y feliz.
Al momento, quiso conocer a ese hombre y comprarle la camisa, pero resultó ser tan pobre que ni camisa tenía.
Esto nos debería hacer reflexionar que la felicidad no está en las riquezas materiales ni en desear lo que no tenemos, si no en agradecer cada día lo que la vida nos ofrece, aunque pueda parecer insignificante.
Me temo que el pobre zar, no se curó de su rara enfermedad...
Dichoso aquel que se conforma con lo que el Señor le brinda, sea lo que sea.
ResponderEliminarUn abrazo.
Asa es Rafael, no vale la pena ambicionar lo que no se puede alcanzar.
EliminarUn abrazo
Pobre Zar rico! Esa es la vida, mucho oropel, nada para disfrutar, un abrazo Ma. de los Angeles
ResponderEliminarA veces se es más feliz con poco, claro que los que están acostumbrados a grandes riquezas, las pequeñeces no les llama la atención.
EliminarUn abrazo María Cristina
Así es Mª Angeles la felicidad radica en aceptar y conformarse con lo que se tiene sin ambicionar nada de lo que no puedas poseer. Un cuento para la reflexión.Besicos
ResponderEliminarNo todo el mundo se conforma con lo que tiene.
EliminarPor ese motivo vienes las envidias y los odios.
Un besito Charo
Bien dicho y bien expresado Mª Angeles, y ahí está la moraleja que debemos tener en cuenta. Espero que hayas tenido una buena Semana Santa. Nosotros ya estamos de vuelta en el blog contando cómo la vivimos. Un fuerte abrazo y buen fin de semana. @Pepe_Lasala
ResponderEliminarBienvenido Pepe, seguro que lo habéis disfrutado mucho pues ha hecho muy buen tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo