miércoles, 14 de marzo de 2012

La casa de las siete chimeneas

Esta es una leyenda que cuando se la conté a mi amiga Piluca casi se me desmaya de miedo. El caso es que siempre me dice que cuente cosas de fantasmas y aparecidos pero después le da miedo y yo, no solamente se lo cuento, si no que la llevo a los sitios donde se que ha ocurrido algo raro. Hace unos días la lleve a ver la casa de las siete chimeneas, mientras estábamos frente a ella contando dichas chimeneas, se me ocurrió decirle que entre las cuatro que están juntas, estaba el fantasma, me miró y yo le conté la leyenda, no me dejó terminar y tuvimos que salir de allí casi corriendo. Peor fue cuando la llevé al Palacio de Linares...pero bueno eso ya lo contare otro día, hoy vamos con la casa de las siete chimeneas:
En el siglo XVI se construyó un magnifico Palacio a las afueras de la Villa. Este Palacio tenía siete chimeneas que servían de respiraderos. En esta casa vivía una hermosa dama protegida del rey Felipe II, vamos, que era su amante. Todas las noches la joven recibía la visita de un noble de la corte. Para acallar murmuraciones se concertó una boda con un oficial de la armada.
La boda se celebró en el convento de San Martín, el padrino fue Felipe II. Yo pienso que además de ponerle los cuernos a la reina, él los llevaba retorcidos. Días después el capitán Zapata, que así se llamaba, fue requerido en la guerra de Flandes y hacia allí partió: No tardó mucho en llegar malas noticias desde el frente, parte de la compañía que había plantado la bandera en el muro de San Quintín, morían por las balas enemigas.
Entre las bajas estaba el capitán Zapata. La joven viuda se quedó sola en su inmenso palacio. Unos meses más tarde apareció muerta de una puñalada en su casa, nunca se averiguo quien fue el autor del crimen. El cuerpo de la dama desapareció, se acusó a su padre de esta desaparición. Hubo muchos comentarios sobre el tema, incluso se llego a decir que pudo haberla emparedado en algún lugar de la casa. Acosado por las deudas, un día apareció colgado de una viga de la casa.
Así comenzó la leyenda: Se oye un toque de "ánimas" aparece una mujer vestida de blanco con una antorcha en la mano, camina por el tejado hacia oriente por entre las siete chimeneas. Después de recorrer todo el alero se pone de rodillas, se da golpes en el pecho y desaparece. En 1766 la casa pasó a ser residencia de Carlos II marqués de Esquilache, en los sótanos se encontraron, un esqueleto de mujer y unas monedas del siglo XVI.
Actualmente esta casa es la sede del Ministerio de Cultura.
Yo le prupuse a Piluca que nos quedásemos a ver si veíamos al fantasma de tan desgraciada señora...ni me respondió y empezó a caminar buscando la boca de metro más cercana y si no corro un poquito la pierdo....

14 comentarios:

  1. Una leyenda merecedora de ese miedo que tenía Piluca...¡Pobre!
    Un abrazo, María de los Ángeles.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Te advierto Pedro Luis, que Piluca es un poco masoquista, siente miedo, pero le gusta que yo la asuste, jajaja.
      Gracias por tu visita.

      Un abrazo

      Eliminar
  2. Estoy imaginándome a una diciendo "vámonos de aquí" y a la otra contando la historia para darle gracia al asunto. ¡Vaya dos! ¡Qué bien os lo pasáis! Sin lugar a dudas es una leyenda fantástica... y muy bien contada. Con lo de los cuernos retorcidos era yo la que se retorcía de la risa. Y claro, entre eso, la biografía del bandolero y las compras de las amigas... ¡Neoabuela no se aburre! ¡Vaya vida! ¡Si al final resulta que es más movida que la mía!

    Muchos besos,

    Alba

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mi querida nieta, que alegría me da leerte. Te he llamado un par de veces pero seguro que estás muy atareada. Como mañana es tu cumpleaños, intentaré hablar contigo.
      Ya sabes que la abuelita Piluca y yo lo pasamos siempre bien...¡Ah, y hablamos mucho de ti.
      ¡¡¡Que bien conoces a tus abuelas!!!

      Un fuerte beso

      Eliminar
  3. Jo Mª Ángeles, a estas horas y me he muerto del susto.
    No conocía esta leyenda ni tampoco el palacio de las siete chimeneas. Intrigante historia para los amantes de los expedientes X.

    Besos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Elena, también a mi consuegra le da miedo, pero luego insiste en que le cuente cosas de miedo...¿Tu entiendes eso?
      Prometo seguir asustándoos.

      Un beso Elena

      Eliminar
  4. Eso le pasa a muchas personas que les encantan las historias de miedo; cuando están frente al asunto no quieren saber nada, jaja. Y con vos al lado no tiene escapatoria con tantas historias y tan bien contadas...

    Yo me hubiese quedado frente a las siete chimeneas, me suele ganar la curiosidad.

    Un gran abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Juan, la casa de las siete chimeneas te habría enamorado. Es suntuosa, de arquitectura barroca muy de aquella época. Viéndola, te crees que no ha pasado el tiempo...bueno yo la veo encantadora, nunca mejor dicho.

      Un gran abrazo

      Eliminar
  5. ¡Incorregible!
    Magnifica historia y mejor aun el relato, como siempre.
    Me encanto y el miedo parece ser que puede cruzar los charcos y hasta lo oceanos.
    En estos momentos estoy en consulta con mi psiquiatra.
    Un beso grande Gata.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, Pluma...que gracioso que estés en el psiquiatra por tan poca cosa.
      Te advierto que a mi no me gustan nada las películas de miedo, las cosas paranormales, etc. Lo que ocurre es que a mi consuegra Piluca le fascinan y a la vez le dan miedo,¿Como se entiende eso? Dejemoslo ahí.

      Un besazo para ti

      Eliminar
  6. Este gato no resiste la tentacion, cuando escucha la palabra tejado asi que decidi entrar en su blog para dejar mi comentario.
    Me gustan estas historias, tambien me gusta como escribe y la historia esta fantastica.
    Un saludo gatuno para usted señora.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gato, ¡Cuanto hubieses disfrutado en los tejados de la casa de las siete chimeneas!
      Gracias por tu visita y también por amabilidad.
      De gata a gato...miauuu.

      Saludo afectuoso

      Eliminar
    2. Interesante esta leyenda de la casa de las 7 chimeneas.Da grima ese lugar!

      Eliminar
  7. No lo creas, Marylin, es una hermosa casa típicamente castellana y muy bien conservada, lo que ocurre es que aquí le sacamos "punta" a todo y además como "viejos" que somos tenemos mucho que contar. ¡Ah, mi amiga Piluca es muy miedosa y yo, exagero, así que nos juntamos "el hambre y las ganas de comer" jajaja

    Besitos

    ResponderEliminar