Dos sustos

No nos libramos ni en vacaciones de sobresaltos. Anoche tuve uno y esta tarde otro, espero que no siga la racha.
Anoche sobre las 12, cuando ya casi todos los del hotel estábamos recogiditos para ir a dormir, yo estaba ante el ordenador viendo mi correo, cuando de repente oigo un pequeño estampido y rápidamente se va la luz. Me quedo quieta con más miedo que "Carracuca", que no se quien era pero mi madre decía esta frase, el ordenador no se apaga, mi hijo dice que no me preocupe, que siga con lo mío pero hace intención de abrir la puerta de nuestro cuarto. Le digo que no salga pues me da miedo que alguien le ataque, (ya me estoy formando la película), pero no me hace caso. Sale al pasillo y vuelve tan rápido como ha salido, me dice: - No pasa nada, dame la mano que tenemos que salir por la escalera pues en la habitación de al lado han saltado los fusibles y quizá se quemen.
Me encuentro solamente con una bata de tirantes y digo que me voy a vestir, me coge de la mano y un poco enfadado me dice: - No pensarás abrir el armario y estar mirando que ropa eliges para huir de un posible incendio.
Hemos salido hacia la escalera, que ya sabíamos donde estaba, para no coger el ascensor.
Ya estaban en el piso, el guarda de noche y otro señor. Antes de llegar al piso de abajo se encendieron las luces, ¡Otra vez arriba! Total, gracias a Dios no ha pasado nada, susto fuera.
El otro susto ha sido también muy gordo.
Serían las 7 P M, cuando aún estábamos en la playa cuando empezamos a ver un revuelo y gritos, acto seguido el vigilante de la playa, se quita la camiseta y sale corriendo, una persona estaba luchando por salir del agua y las olas no le dejaban avanzar. Hemos visto con mucha alegría como lo ha sacado el vigilante. Enseguida lo han metido en una ambulancia. Era impresionante como estaba la playa de policía y sanitarios, menos mal que todo ha quedado en eso, un susto.
Tengo que decir que la playa estaba en bandera amarilla, pero hay mucha gente que no acata las reglas.
Como es sábado y no quiero que os olvidéis de que es día de buen humor, ahí vamos:
Antes pido disculpas a todos los catalanes y me solidarizo con ellos por lo ahorrativos que son...yo también lo soy.
Un catalán en la playa:
Una gran ola cubre parte de la playa y se lleva a un niño que estaba jugando en la orilla con su palita...Su padre Josep, corre desesperado, mira al cielo y se dirige directamente a Dios: "Deu meu...soc jo, el Josep, no pots hacerme esto a mi...no pots llevarte al nen...yo siempre he sido un buen catalán, buen cristiano, cumplo lo que dice la religión al pie de la letra, no pots hacerme ésto a mi...voy a misa, a Montserrat, colaboro con la comunitat...por favor...devuélveme a mi hijo...tráelo de nuevo junto a mi "...
En ese momento, un rayo rompe el cielo, un estruendo silencia a los veraneantes...sin duda es la señal de Dios para Josep... una nueva ola llega desde el mar...y devuelve al niño a la orilla...
Josep es testigo del milagro, su amado hijo ha vuelto...
Entonces con lágrimas en los ojos, vuelve a mirar al cielo, respira profundamente y le dice al Supremo:
"Señor...¿...y la palita,,,?