jueves, 12 de septiembre de 2013

La maldita envidia

SE CUENTA QUE UNA BELLA Y LUMINOSA LUCIÉRNAGA AVANZABA CON DONAIRE

CUANDO SE PERCATÓ DE QUE LA SEGUÍA UNA ESCURRIDIZA SERPIENTE.

AVANZÓ Y AVANZÓ, PERO COMO ERA TAN PEQUEÑITA SE CANSABA, PUES

SIEMPRE VEÍA  A  LA SERPIENTE SIGUIÉNDOLA. PERO AL FINAL NO TUVO MÁS

REMEDIO QUE DETENERSE Y, ANTES DE SER ATACADA, PORQUE NO VEÍA EL MODO

DE GANARLE TERRENO, PREGUNTÓ A LA SERPIENTE:

-"¿ TE HE HECHO ALGÚN MAL?".

RECIBIÓ POR RESPUESTA:

-"NO".

VOLVIÓ A PREGUNTAR:

"¿ENTONCES POR QUÉ QUIERES ACABAR CONMIGO?".

Y LO ÚLTIMO QUE ESCUCHÓ FUE:

-"PORQUE NO SOPORTO VERTE BRILLAR".

Es muy corta la fábula, historia o cuento, pero me parece muy intensa, por ese motivo la he querido compartir. Hace unos días que la leí y me hizo llorar...¡¡¡Que mala es la envidia!!!

2 comentarios:

  1. Ma de los Angeles, es uno de los defectos que sufre más el que la siente que el que la genera sin querer, un abrazo!

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    1. Creo que es malo para ambos, pero el que la sufre, además se vuele mala persona por no saber controlarse.
      Un abrazo María Cristina

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